Caroline Kennedy, orgullo de madre en la visita con su hijo Jack a los huérfanos de Fukushima
Caroline Kennedy, embajadora de Estados Unidos en Japón, viajó la semana pasada en compañía de su hijo Jack a la zona de la central nuclear de Fukusima. Tanto Jack, un joven de 21 años, fuerte y alto que le saca una cabeza a su madre, como la bella embajadora, la primera ciudadana estadounidense que ocupa tan destacado puesto en el país del sol naciente, recorrieron algunos de los lugares de la central con trajes protectores y sendos cascos amarillos.
“Es difícil visualizar y comprender la complejidad del reto( limpiar los residuos altamente radiactivos que siguen filtrándose al océano Pacífico desde los reactores de la planta) solo leyendo, así que ésta fue una visita muy informativa”, dijo Kennedy tras finalizar el recorrido. Unas palabras que ratificó su hijo, quien declaraba: "Espero que mis amigos, mi generación en Estados Unidos mantenga en la mente a Fukushima y entienda que todavía hay mucho qué hacer y podemos hacer algo al respecto".
Posteriormente visitaron en Child Fukumaru, un centro creado para ayudar a los niños que se quedaron huérfanos a causa del tsunami del 11 de marzo de 2011. Jack Schlossberg es el menor de los tres hijos de Carolina Kennedy a Arthur Schlossberg. El matrimonio tiene dos hijas: Rose, de 25 años y Tatiana, de 24.