Después de que el pasado jueves fuera operado con éxito de un carcinoma epidermoide en el cuello, Adolfo Suárez Illana permanece ingresado en la Fundación Jiménez Díaz, en Madrid, donde este fin de semana ha estado rodeado de sus familiares y amigos más íntimos.
Su mujer, Isabel Flores ha permanecido a su lado en todo momento, al igual que sus hermanos, Sonsoles, Laura y Javier, a quienes veíamos este fin de semana a las puertas de este centro hospitalario. “Ha salido todo bien”, decía Sonsoles Suárez a su llegada.
Además de su familia, también estuvieron algunos amigos como la ministra de Sanidad, Ana Mato, o el torero Juan José Padilla, acompañado por su mujer, Lidia Cabello. “Estamos muy contentos, sobre todo por la evolución de la operación. Los doctores están contentísimos también. Él está fuerte, muy animado, se siente muy apoyado por su familia, por sus amigos, por España, porque todo el mundo está rezando y pidiendo por él porque es una persona que no se merece otra cosa que salir adelante con la entereza que siempre ha demostrado”, decía el diestro.
Esta ha sido la primer intervención de las dos previstas y todos están muy contentos porque ha salido todo bien: “Todo ha salido perfectamente, gracias a Dios, y esperamos que en la próxima siga todo igual. Él ya puede beber y comer tranquilamente, está sentado y muy bien”, decía Padilla en la entrada a de la Fundación Jiménez Díaz. Y añadió: “Quiero agradecer a todos, en nombre de la familia, toda la atención que habéis tenido y sobre todo a todos los españoles, que sé que hay muchas personas que están pidiendo por él, rezando por él, y eso se agradece profundamente”.
La operación fue realizada por el cirujano Raimundo Gutiérrez y, tal y como explicó el portavoz de la familia Fermín Urbiola a EFE, estuvo en todo momento acompañado por su esposa y sus hermanos. Se prevé que permanezca una semana ingresado y después de su recuperación volverá a ser intervenido en el Hospital Universitario Rey Juan Carlos de Madrid.
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