El club de fútbol Bayern Múnich ha recibido el el trofeo de la Bundesliga, un triunfo que ha llenado de alegría a todo el equipo y en especial a su entrenador, Pep Guardiola, que no pudo contener la alegría al proclamarse vencedores ante la emocionada afición, donde se encontraban su mujer, Cristina, y sus hijos.
La familia del entrenador asistió al estadio Allianz Arena, donde se disputaba el partido, para brindarle el mejor apoyo posible. Y no hay duda de que se convirtieron en el mejor amuleto para Pep, que condujo a su equipo hasta la victoria. Así su esposa, Cristina Serra, y sus tres hijos, María, Màrius y Valentina, presenciaron con una gran sonrisa el feliz momento en el que recogió el trofeo.
Además, Pep tuvo que someterse a un ritual del que no se libra ningún entrenador del Bayern que logre ganar la Bundesliga o la Copa de Alemania: la llamada "ducha de cerveza". A diferencia de lo que hicieron algunos de sus antecesores, Pep no intentó escapar, sino que aceptó con humor lo que ya se ha convertido en una tradición.
El entrenador protagonizó un momento anecdótico cuando, al celebrar a pie de campo la victoria del equipo, el trofeo del Bundesliga se le resbaló, cayendo al suelo. El incidente ha sido muy comentado en las redes sociales, en especial por su parecido con el protagonizado por Sergio Ramos en 2011, cuando dejó caer la Copa del Rey.
Tras el partido, Pep y su esposa asistieron juntos a la cena de celebración, donde se reunieron con los jugadores para poner el broche de oro a un día de triunfo para ellos.
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