Era su sueño y anoche vio cómo se hacía realidad. Blanca Cuesta inauguró la primera exposición de sus obras y lo hizo rodeada de familia y amigos. Las paredes de la madrileña galería de arte de David Bardía, Proposing Fluor, albergaron sus 25 cuadros en esta muestra de carácter benéfico, ya que parte de los beneficios que obtenga irán destinados a la fundación del padre Ángel, quien no faltó a esta cita con el arte.
Con su marido, Borja Thyssen, sin separase de su lado y con los nervios a flor de piel, daba comienzo la exposición con un emotivo discurso: “Quiero daros la gracias a todos por estar aquí apoyándome porque es un momento muy importante para mí y ver caras conocidas es increíble. Borja, mil gracias por el apoyo que me has dado desde el primer momento, desde el minuto cero. A Pedro le debo mucho, viste mi talento y me diste clases, y David, gracias por esta oportunidad, creíste en mí, tu apoyo es fundamental y el apoyo de la familia y amigos ha sido y será siempre importante. Gracias por estar aquí”.
Borja reconoció que estaba muy emocionado y también que es bastante crítico con sus cuadros: “Prefiero no entrar en el taller de pintura hasta que termina. Pero una vez que entro, soy bastante duro con ella. Y como marido y coleccionista me encanta su obra”. Tampoco podían ocultar lo orgullosos que están de ella sus padre, Miguel y Heidi Unkoff, que dijeron estar encantados con el trabajo de su hija.
También estuvieron arropándola su maestro en el mundo de la pintura, Pedro Sandoval, y varios amigos como Paloma Segrelles madre e hija, Cristina Tárrega con su marido, Mami Quevedo, y Susana Uribarri, quien coincidió allí con su expareja Darek, con quien tras su ruptura mantiene una relación cordial.
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