Entre la alegría y la tristeza. Así son este años las Navidades de Bertín Osborne y Fabiola. Alborozo porque Sandra, la nieta de Bertín, ya está fuera de peligro. Consternación por la pérdida de su hermana, Leticia, que no logró salir adelante. Pero el matrimonio tiene dos hijos, Kike y Carlos, que solo saben que la Navidad es felicidad, ilusión y regalos. "Va entonces por ellos", han debido pensar el cantante, actor, presentador y empresario, y su mujer.
Esta semana en exclusiva para la revista ¡HOLA!, el artista cuenta cómo han vivido la triste pérdida de su nieta Leticia: "He llorado sí, pero como en casa todos buscan consuelo en mí, tengo que mantener el tipo". Todos saben que Bertín sabe sacar sonrisas en los momentos más duros, aunque el ha sufrido mucho : "Todo esto me ha recordado cuando mi hijo Christian, que también nació prematuramente, murió en mis brazos. La pérdida de un hijo nunca se llega a asimilar. "Afortunadamente su otra nieta, Sandra, "ya ha pasado los ochocientos gramos y está fenomenal, gracias a Dios. Comiendo y engordando. Ya no tiene respiración asistida".
En un excepcional reportaje, Bertín posa con su mujer, Fabiola, y sus dos hijos, Carlos que acaba de cumplir cinco años, y Kike, de siete, en el salón de su casa madrileña. "Dentro de todo lo que nos ha pasado, la mayor bendición es mi hijo Kike, porque que esté con nosotros es una maravilla, no un problema como puedan pensar algunas personas". Y asegura: "Kike va haciendo cada vez mejor todas las cosas que ya ha aprendido. A medida que pasa el tiempo, es más comunicativo con todo el mundo, lo que dice mucho de su personalidad sociable".
Fabiola reconoce haber formado una familia de ensueño: "Tengo la familia que quise con un hombre al que adoro. Seguimos muy enamorados, y aunque ahora no estamos para muchas celebraciones supongo que cualquier año damos la sorpresa y volvemos a casarnos para celebrar nuestro aniversario".
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