Jessica Bueno está de nuevo en Sevilla. La modelo sevillana ha regresado a su ciudad natal acompañada de su hijo Francisco para visitar a sus padres después de su polémica mudanza a Eibar, lugar en el que reside actualmente junto a su pareja, el futbolista Jota Peleteiro.
Jessica, quien ha rehecho su vida a casi 900 kilómetros de su antiguo hogar, ha dedicado sus primeras horas en Sevilla a pasear en compañía de sus padres, para quienes la llegada de su hija y su nieto siempre es un gran motivo de alegría.
La expareja de Kiko Rivera aprovechó el paseo para visitar una tienda de trajes de fiesta, pues al parecer la modelo tendría una boda este fin de semana en la que le gustaría lucir perfecta.
Ataviada con un look muy casual, leggins tejanos, camiseta y una camisa de cuadros, Jessica regresó a casa de sus padres tras una jornada agotadora, en la que pudimos ver como el padre de la modelo portaba en sus brazos al pequeño Francisco.
Y mientras Jessica disfruta de unos días en Sevilla, Kiko Rivera se encuentra visitando algunos platós televisivos, entre ellos el de Sálvame Deluxe donde comentó que su expareja se había llevado a su hijo a Eibar sin su consentimiento, dejando todo el tema en manos de sus abogados. "Llevo tres semanas sin saber nada de mi hijo porque ella se ha enamorado. Enamórate y sé feliz, pero no olvides que soy el padre del niño. Antes de haberte llevado al niño tendríamos que haber hablado", declaraba el hijo de Isabel Pantoja, quien hoy mismo ha acudido a El programa de Ana Rosa Quintana. Jessica, por su parte, ha decidido guardar silencio, un silencio que romperá el próximo 4 de noviembre cuando se celebre el juicio sobre la custodia de su hijo.