Palma de Mallorca está siendo durante estos días el epicentro del glamour y los amantes de las regatas. Después de ver a una radiante Vanesa Lorenzo, eso sí, sin su novio, el futbolista Carles Puyol, y a una enamorada Ana Bono junto a su chico canadiense, Simon, han sido muchos los rostros conocidos que han puesto rumbo a la isla balear para disfrutar de todas las celebraciones y eventos que están teniendo lugar con motivo de la 32ª Copa del Rey MAPFRE de Vela.
La tradicional Cena de Armadores, la cita más emblemática del Real Club Náutico de Palma durante este conocido torneo, tuvo lugar en las terrazas del club. Entre los invitados se encontraban las hermanas Alejandra y Eugenia Osborne, que acudieron con sus respectivos maridos, Joaquín Buendía y Juan Melgarejo, además de los diseñadores andaluces Victorio & Lucchino o Carmen Lomana. Todos, vestidos de blanco tal y como exige el dress code de la exclusiva fiesta. La música estuvo a cargo de Miranda Makaroff, que fascinó al publico con su dulzura y su buen hacer como DJ.
A pesar de la multitud de personalidades que acudieron a esta tradicional velada, todas las miradas se las llevaron las hijas de Bertín Osborne, que ya habían causado sensación por la mañana en uno de los selectos desayunos que tienen lugar cada día en el Real Club Náutico de Palma, en el que coindicieron con la reportera Berta Collado. Alejandra se decantó por un top asimétrico que combinó con una minifalda de paillettes plateados con la que lució su envidiable figura, mientras que Eugenia estaba radiante con un sencillo vestido al que puso el toque de color con un original y llamativo bolso de mano con detalle de color amarillo.
Ni Eugenia ni su marido pudieron borrar la sonrisa de sus rostros durante toda la noche. Y es que están viviendo, sin duda, una etapa de lo más especial. Hace unos días la hija de Bertín Osborne nos confirmaba en exclusiva en las páginas de la revista ¡HOLA! que está de nuevo embarazada. "Es un bebé deseadísimo. Teníamos muchas ganas de darle un hermanito a Juan para que jugasen", confesaba emocionada la futura mamá, que afirmaba que aunque todavía no está de mucho, "las buenas noticias hay que disfrutarlas desde el principio".
De hecho, de momento casi no se le nota la 'tripita', pero sí tiene ese brillo especial que irradian las embarazadas. "Afronto esta nueva maternidad muy contenta y con algo de miedo. He tenido la mejor de las experiencias con el primero, pero cada niño es un mundo, y lo que le ha ido bien a él, a lo mejor al otro no. Es como empezar de nuevo", añadía.
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