A dos meses de su boda, Francisco Rivera confiesa: 'Tengo una ilusión que no había tenido nunca'

Cuando tan solo quedan dos meses para que Francisco Rivera y Lourdes Montes se den el ‘sí, quiero’, el extorero ha hablado sin tapujos sobre todo lo que rodea a este gran acontecimiento en su vida. Con los nervios propios de ver que se acerca el momento, Francisco se encuentra ahora centrado en los preparativos del enlace, los que ha dejado unas horas de lado para presentar su renovada tienda de ropa en Sevilla, un local mucho más grande del que tenía antes, señal de lo bien que le van las cosas con el negocio textil.

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Muy ilusionado con este proyecto, junto a su socio Cristóbal Soria, Francisco no dudó en contestar a las preguntas de los medios de comunicación allí congregados, a los que confesó que cuando tiene tiempo le gusta ponerse detrás del mostrador y atender personalmente a los clientes.

-¿Estás centrado en tu faceta de empresario?
Sí, claro. Ahora acabamos de trasladar la tienda a una zona más comercial, en la calle Eloy número 13.

-¿No eres supersticioso?
Nada. Y espero que el cambio sea a mejor.

-¿Este año alejado de los ruedos te estás volcando más en la faceta de empresario?
Claro hay que currar. No hay ninguna duda. La cosa está complicada. La verdad que estoy volcado en mi trabajo, y así no echo tanto de menos el mundo del toro.

-¿Eres hiperactivo?
No, hiperactivo no, pero no me gusta estar parado. No me da tiempo a aburrirme.

-¿Y cómo te ves este verano alejado de los ruedos?
Estoy bastante alejado, de hecho no tengo tiempo ni de ir a ver los toros. Hay toreros que están haciendo cosas importantes y he disfrutado mucho de la Feria de Sevilla. Pero ya no voy tanto como me gustaría.

-¿Qué te han parecido las imágenes del encierro de Pamplona?
Me lo han contado pero no lo he visto.

- ¿Tu has llegado a correr los encierros?
Si, yo los corría por la mañana y toreaba luego por la tarde.

-A menos de dos meses para cambiar de estado civil. ¿Vas contando los días?
Queda poquito. Tengo una ilusión que no había tenido nunca. Estoy deseando que llegue el día.

-¿Estás nervioso?
Hay días que sí. Aunque lo único que me preocupa es que todo salga bien.

-¿Quien se está encargando de los preparativos?
Lourdes y yo.

-¿No habéis delegado en familiares o amigos?
No, nada. Lo estamos haciendo todo nosotros, aunque nos ayudan y nos aconsejan.

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- Se comenta que habéis impuesto unas normas de vestimenta especiales para los invitados.
Todo tiene su protocolo y sus normas. Pero va a ser una boda fundamentalmente de amigos. Los que vengan serán muy allegados a nosotros.

-¿Tendrás vacaciones este verano?
Claro, como todo hijo de cristiano.

-Pero serán las primeras que pases relajado.
Sí, la sensación de no tener que pasar miedo mola. Duermo mucho mejor.

-¿Sigues haciendo deporte?
Menos, mucho menos. Estoy más gordito.

-Además eres aficionado a la buena comida.
Sí y además no me privo de nada.

-¿Hay sentencia ya sobre tu nulidad matrimonial?
Que va. Lo lleva el tribunal eclesiástico pero aún no hay respuesta. Pero espero tener un veredicto favorable muy pronto.