"Me he desgastado, me he vaciado y necesito llenarme”. Esas fueron exactamente las palabras de Pep Guardiola cuando, el pasado mes de mayo, dejaba el FC Barcelona, en una emotiva despedida en la que recibió el calor de hasta 90.000 espectadores. Ahora, meses más tarde, seguramente el exentrenador del club esté algo más recuperado de años y años de incansable esfuerzo al frente de uno de los mejores equipos del mundo. Los grandes responsables de su ‘recuperación’, no son otros que los miembros de su familia, de quienes no se separa desde que abandonó su cargo.
Así, con el fin de alejarse un poco de los banquillos, Pep decidió mudarse a Nueva York, donde vive desde hace unos meses junto a su mujer, Cristina Serra, y sus tres hijos: Marius, María y Valentina. Como cualquier padre, Guardiola salió a dar un paseo con sus tres ‘chicas’ por el Soho, una de las zonas de moda de la ciudad de los rascacielos muy frecuentada por los amantes de las compras. Él con ropa cómoda y su mujer con unas altísimas sandalias de cuña, el matrimonio recorrió algunas de las calles de la zona junto a María y Valentina, quienes parecen estar encantadas con su nueva vida en Estados Unidos, tanto que la más pequeña llevaba hasta una camiseta con la frase ‘I love NY’ inscrita.