Hace unos días, Luis Alfonso de Borbón vivió uno de los momentos más tristes de su vida cuando tuvo que despedirse de su abuela paterna, Emmanuela de Dampierre y Ruspoli, viuda de Jaime de Borbón, hermano de don Juan de Borbón, padre del actual rey de España y madre de los fallecidos Alfonso, duque de Cádiz y padre de Luis Alfonso y Gonzalo de Borbón, en un emotivo funeral que tuvo lugar en la iglesia Val-de-Grâce de París. En la solemne celebración estuvo arropado no sólo por su mujer, Margarita Vargas, que no pudo contener las lágrimas, sino también por su madre, Carmen Martínez-Bordiú.
Su abuela era el último eslabón vivo que le unía a su familia paterna directa, sin embargo, Luis Alfonso sabía que, tras este momento tan doloroso, su vida debía continuar y la pareja regresó a Madrid para volver a su día a día con sus hijos. Así, durante este fin de semana han sido ellos, Eugenia, de cinco años, y los mellizos Luis y Alfonso, de dos, los que han conseguido que sus padres recuperen la sonrisa.
Vestidos de la misma forma, con pantalones de color 'beige' y jerseys azul marino de rayas rojas, los pequeños se lo pasaron en grande jugando en el césped y viendo a los caballos en el Concurso de Saltos Internacional de Madrid, que durante estos días se ha celebrado en el Club de Campo Villa y ha reunido a los mejores jinetes y amazonas. Entre ellos, se encontraban Marta Ortega y Sergio Álvarez, que se mostraron de lo más cariñosos, Athina Onassis y Doda Miranda o Carolina Aresu, sobrina de Ana Obregón, que hicieron las delicias de los espectadores que no quisieron perderse su cita con la hípica, como Mar Saura o Álvaro Muñoz Escassi, que no se separó ni un instante de su novia, Patricia Martínez.