Connor Cruise, Pierre Sarkozy, Fonsi Nieto... ser DJ está de moda
La música está presente en casi todas las ocasiones. Una noche entre amigos, una presentación, un desfile… Casi siempre cuando estamos en alguna de ellas sólo nos fijamos en la melodía que suena, pero pocas en la persona que crea esa combinación de estilos que llena el ambiente de magia. El pinchadiscos ha evolucionado igual que lo hace el sonido, ahora a los ases de las mesas de mezclas se les llama DJ’s, una profesión o hobby que cada vez va ganando adeptos y que ha pasado de estar en la sombra a la primera fila. David Guetta, DJ Tiësto, Bob Sinclar, ¿quién no ha oído hablar de ellos en alguna ocasión?
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Se han convertido en estrellas de la música por su habilidad para encontrar la mezcla perfecta, una pasión y un arte que cada vez prueban más caras conocidas. Sin movernos de España encontramos a Fonsi Nieto, que tuvo que abandonar antes de lo que le habría gustado su carrera como piloto de motos y se ha colocado los cascos para animar a la gente. Fiestas, discotecas, locales de moda, nada se le resiste a este nuevo “fichaje” de los ecualizadores.
Se han hecho famosos por ser “hijos de” pero no se resignan a ser conocidos sólo por su apellido. Connor, hijo de Tom Cruise y Nicole Kidman, intenta encontrar su lugar en el mundo del espectáculo. Ha participado en varios proyectos cinematográficos como la película Siete almas o el remake de Amanecer rojo, aunque también ha hecho sus pinitos en la música. A sus 16 años, se ha bautizado con el nombre de DJ C-Squared y ha creado con su mejor amigo, Jake Isham, una empresa musical que les representa. Y es que las nuevas generaciones vienen pisando fuerte.
A Pierre Sarkozy le ocurre otro tanto. No ha heredado los genes de político de su padre Nicolás pero seguro que en el Elíseo no falta una buena banda sonora. El menor de los hijos que Sarkozy tuvo con Marie-Dominique Culioli compone y produce hip-hop bajo el seudónimo de Mosey y es líder de un grupo llamado Crime Chantilly. En 2008 produjo un álbum de rap titulado Peace Maker y entre sus trabajos figuran los temas Freestyle para David Banner y La rue para Poison.
Menos profesional, aunque no menos atractivo es Jesús Luz. Se introdujo en el show business de la mano de la maestra, Madonna, aunque ya era un rostro reconocible en las pasarelas. Sus penetrantes ojos azules le llevaron a ocupar no sólo el corazón de la diva sino planos en su vídeoclip Celebration en el que ejercía de irresistible DJ. Dicho y hecho. El brasileño no pudo evitar la tentación de “hacerle la competencia” a su ya ex novia y fue una de las atracciones del pasado año en Ibiza. Y a esta lista de DJ’s más o menos vocacionales se une Alexa Chung, imagen de importantes firmas, portada de revistas y protagonista de vídeos musicales que acabara tras una mesa de mezclas era cuestión de tiempo. Se bajó de la pasarela para dar el salto a la televisión y la radio y ha ejercido de pinchadiscos ocasional.