Consciente de que su imagen se ha convertido en todo un referente, Iker Casillas ha decidido sacarla ‘partido’ y que mejor manera de hacerlo, que ayudando a los demás. El guardameta del Real Madrid y la selección española de fútbol se comprometió ayer a luchar contra la pobreza en el mundo desde su recién asignado puesto de embajador de buena voluntad del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Con la naturalidad que le caracteriza y orgulloso de esta nueva responsabilidad en su vida, el guardameta ofreció una rueda de prensa para hablar sobre su labor en la ONU. "Agradezco la confianza que han depositado en mí y espero y quiero responder de la mejor forma posible. Mis valores y mi educación vienen de cuando era muy pequeño y agradezco a mis padres por eso", afirmó Casillas, quien se desplazó hasta la sede de Naciones Unidas en Ginebra para hacer oficial este compromiso.
"Sé que es una gran responsabilidad, pero también sé que estoy capacitado para poder asumirla", agregó, antes de mostrar su agradecimiento a su club, el Real Madrid. "Es mi segunda casa, que me ha dado la oportunidad de ser conocido", subrayó.
Convertido en campeón del mundo, hecho que no podrá olvidar en su vida, y enamorado de su trabajo y de su chica, la periodista Sara Carbonero, Casillas atraviesa uno de los momentos más dulces de su vida, algo que se verá sin duda reflejado en esta nueva responsabilidad como embajador. "La vida me ha dado tantas cosas buenas que hay que poder corresponder de alguna manera a la sociedad”, admitía el portero durante su comparecencia.
Pero la trayectoria solidaria de Casillas no dio comienzo ayer, el futbolista, no solo ha organizado algún que otro acto para recaudar fondos, como el que organizó junto a Rafa Nadal para luchar contra los enfermos de paludismo de Malí, sino que también se desplazó in situ hasta Perú, para conocer de cerca como viven allí los niños más desfavorecidos e intentar concienciar al resto de la humanidad de lo necesaria que es la ayuda. "Yo viajé hace un par de años a Perú, la verdad que fue algo maravilloso, primero porque conocí Machupicchu y segundo por la cantidad de seguidores del fútbol español que hay allí. Por supuesto que tengo la idea de retomar mis viajes porque el año pasado sufrí un parón, más que nada por el Mundial, y después de la Copa Confederaciones y la Eurocopa, mis vacaciones fueron escasas y decidí desconectar", señaló.
Acompañado por Emilio Butragueño actualmente director de Relaciones Institucionales del club de fútbol español, Iker vivió una jornada fuera de los campos de fútbol muy diferente a la habitual, aunque convertido, una vez más, en el centro de atención de cientos de fotógrafos que no quisieron perderse la oportunidad de retratar al madrileño en Ginebra. Y es que a pesar de su popularidad, Iker, quien siempre ha presumido de ser un chico normal, no llega a acostumbrarse a la fama, por eso ayer no perdió la oportunidad de reiterar: “Yo no soy famoso, solo soy un deportista”.
Con este nuevo cargo en su ‘curriculum’ Casillas se suma así a otros ocho embajadores de buena voluntad del PNUD: cuatro futbolistas, Ronaldo de Lima, Zinédine Zidane, Didier Drogba y la número uno mundial del fútbol femenino, Marta Vieira da Silva; la tenista Maria Sharapova, el actor español Antonio Banderas, la actriz japonesa Misako Konno y el príncipe heredero Haakon de Noruega.