Rafa Nadal y Roger Federer han demostrado que son imbatibles en las pistas y también en solidaridad. Las dos mejores raquetas del mundo volvieron a unirse por tercera vez en un mes para ayudar a los más necesitados. Rafa y Roger hicieron un alto en los entrenamientos oficiales del Open de Australia (que comenzará mañana) para protagonizar una exhibición benéfica en el estadio Rod Laver Arena de Melburne cuyos fondos se destinaron a las víctimas de las recientes inundaciones en Brisbane.
“Es una tragedia terrible, no sólo por la pérdida de vidas, sino por la destrucción de los hogares de tantas personas. Estoy encantado de poder contribuir de alguna manera a atraer la atención mundial sobre el asunto y conseguir algo de dinero para las víctimas”, explicó el mallorquín minutos antes del encuentro. Por su parte, el suizo, que contó con el apoyo en las gradas de su mujer Mirka, agregó que "queríamos hacer algo para ayudar, porque sabemos que miles de australianos seguirán sufriendo esta catástrofe".
En el acto también participaron otras estrellas del tenis como Kim Clijsters, Samantha Stosur, Ana Ivanovic, Victoria Azarenka, Caroline Wozniacki y Novak Djokovic. Los australianos Leyton Hewitt y Pat Rafter también participaron en el evento benéfico y Hewitt expresó que “Soy australiano y me siento muy afectado por una catástrofe como esta”. De hecho, la nota más tierna del encuentro la puso, Cruz, el hijo de Hewitt. El niño, que el pasado 11 de diciembre cumplió dos añitos, saltó al terreno de juego muy tímido y no se separó de su papá en ningún momento.
Más de 16.000 aficionados ocuparon las gradas del Rod Laver Arena y, según la organización del encuentro, se lograron recaudar más de 200.000 euros. El año pasado, y también durante el Open de Australia, Rafa Nadal y Roger Federer disputaron un partido de exhibición para ayudar a las víctimas del terremoto de Haití. Tras el encuentro, el mallorquín escribió en su cuenta personal de Facebook que todo había sido “una gran idea” de Roger.