Inmejorable era el aspecto que presentaba Fonsi Nieto a su llegada a Madrid esta mañana. El piloto estaba feliz de regresar a España tras el aparatoso accidente que sufrió a finales del mes pasado durante el Gran Premio de Indianápolis. Se encontraba entrenando cuando sufrió una aparatosa caída en la que se rompió los huesos astrágalo y calcáneo del pie izquierdo. Sin embargo, la intervención a la que fue sometido en el Methodist Hospital de Indianápolis no fue satisfactoria ya que tuvo que ser operado de nuevo. "Después de la operación él no paraba de gritar de dolor, estuvo bastante tiempo pegando gritos y con el pie muy negro. Al final los médicos le pusieron una inyección y entró en parada respiratoria -aún no había superado los efectos de seis horas de operación y de anestesia-, y estuvo así como 40 segundos hasta que lo reanimaron. Él dice que estuvo muerto un minuto", relataba su tío el ex piloto Ángel Nieto.
Con una actitud muy optimista Fonsi Nieto daba, poco después de aterrizar en España, una rueda de prensa desde el Hospital San José de Madrid, donde mañana será intervenido para que se recupere de su lesión a la mayor brevedad. "Nadie dijo que era fácil. Yo me quiero recuperar pronto para estar otra vez en la pista. Ver las carreras por la tele no es muy agradable, es la segunda vez que me pasa en mi carrera. No es agradable ver una carrera desde la cama de un hospital. Quiero recuperarme cuanto antes para estar ahí corriendo. En esos momentos tan duros en los Estados Unidos estaba pensando en volver. Hay fines de semana bonitos y otros que no son tan bonitos. Lo hemos elegido, tanto yo como todos los que estamos en una parrilla de salida. Lo hago porque quiero y porque me gusta".
El doctor Ángel Villamor, será el encargado de su tratamiento. Desde primeras horas de la mañana, el ex marido de Ariadne Artiles fue sometido a numerosas pruebas, a raíz de las cuales los facultativos han concluído que no podrá realizar ejercicios de fisioterapia ni apoyar el pie en, al menos tres meses, ya que de lo contrario podría verse afectado por una futura rigidez en el tobillo, con las consecuentes limitaciones a la hora de competir.