Las vacaciones de Mar Flores y Javier Merino están siendo de lo más familiares y marineras. Apasionados del mar como son, disfrutaron a primeros de agosto de la costa mallorquina y la pasada semana volvieron a Ibiza, su destino habitual del verano, donde tienen casa y aprovechan casi a diario para disfrutar de unas pasiones, el mar.
A Mar y Javier no los hemos visto en las grandes fiestas ibicencas de la temporada, prefieren el día y disfrutar de sus dos hijos, Mauro, de nueve años, y Beltrán, de cuatro. Como cuando fueron tomadas las fotografías que acompañan estas líneas, el matrimonio pasó el día en Formentera y Javier se encargó de conducir la zodiac que les llevó desde su barco a la playa. Los niños jugaron en el mar y la familia al completó comió en un chiringuito. Tras la excursión, vuelta al barco para regresar a Ibiza. Sólo faltaba Carlo, el hijo mayor de Mar, que vive con su padre.