Todos le hacíamos en Portugal, donde según publicó el Diário de Notícias se encuentra su hijo recién nacido junto a su familia. Sin embargo, este lunes Cristiano Ronaldo se dejaba ver en público al otro lado del Atlántico, concretamente en Nueva York. Ajeno al revuelo que ha causado en todo el mundo después de anunciar que ha sido padre recientemente, el futbolista luso era fotografiado a la salida del restaurante Da Silvano de la ciudad de los rascacielos.
El delantero del Real Madrid había quedado en este local de Greenwich Village junto a Irina Shayk, la espectacular modelo rusa con la que se le viene relacionando desde el pasado mes de mayo, cuando ambos se dejaron ver juntos disfrutando de unas vacaciones en Córcega. El deportista llegó antes y esperó en el interior del restaurante a que llegara ella, que acudió junto a una amiga. Tras el almuerzo, Cristiano esperó a que las dos chicas abandonaran el sitio en un coche todoterreno para salir él del local.
Se desconocen los motivos por los que Ronaldo se ha reunido con Irina, aunque es de suponer que lo ha hecho para tratar el asunto de su paternidad, que pilló a todos por sorpresa cuando la anunció en la madrugada del pasado domingo a través de Facebook y Twitter. Según el citado medio portugués, el astro del balón viajó al Algarve para conocer a su hijo, que se encuentra allí al cuidado de su madre y sus hermanas, cuando la selección portuguesa cayó eliminada ante España en el Mundial de Sudáfrica.
Una paternidad rodeada de incógnitas
Dado que la identidad de la madre del hijo de Cristiano permanece en el anonimato, se han levantado especulaciones en torno a la paternidad del jugador portugués. El Diário de Notícias portugués y el británico Daily Mail afirman que el futbolista, de 25 años, habría recurrido a una madre de alquiler para ser padre, una chica a la que habría conocido durante sus vacaciones en San Diego el pasado verano. Otros medios, sin embargo, se preguntan si el niño podría ser fruto de un affaire amoroso del madridista.