María Rosa Salvador pasará a la historia de la moda por su contribución como diseñadora, pero también como fundadora de uno de los premios más prestigiosos: la Aguja de Oro. Una singular joya de oro amarillo con 27 diamantes que, durante 26 ediciones, distinguió a nombres tan destacados como Giorgio Armani, Tom Ford, Óscar de la Renta, Valentino, Emanuel Ungaro, Karl Lagerfeld, Jean Paul Gaultier, John Galliano o los recordados Franco Moschino y Gianni Versace.
La modista contaba con numerosos amigos, los mismos que quisieron despedirse de ella en el funeral que se celebró en su recuerdo en Madrid. Hasta la iglesia de Nuestra Señora de los Sagrados Corazones de la capital se acercaron numerosos amigos de esta gran dama de la moda española, entre ellos algunos rostros conocidos del panorama social.
Isabel Preysler, tan elegante como siempre, no quiso faltar a la misa en memoria de su gran amiga. Isabel entró en la iglesia junto a Nuria González. Ambas mostraron sus condolencias a la familia de esta ‘dama de la moda’.
El diseñador Jesús del Pozo, compañero de profesión de María Rosa, también acudió a darle su último adiós acompañado de la modelo Nieves Álvarez, con un traje de corte masculino con abrigo negro y una estola de piel para protegerse del frío.
Marisa de Borbón y Cari Lapique fueron otras de las amigas que quisieron recordar a María Rosa y dar su pésame a la familia. Cari, que llegó sola, no puede evitar una gran sonrisa cada vez que le preguntan por su hija mayor, quien le hará abuela en pocas semanas.
María Rosa Salvador nos decía adiós para siempre el pasado 1 de febrero a los 84 años de edad. Inteligencia, perseverancia en el trabajo, generosidad... son sólo algunos de los adjetivos con los que quienes mejor la conocían definen a la ‘petite espagnole’ (tal y como fue conocida en salones de moda de París), una de las mayores impulsoras de la moda española y referente de la moda europea.