Mansiones de ensueño, coches de lujo, ropa de marca para ir siempre a la moda… No es ningún secreto que tanto David Beckham como su esposa, Victoria, no reparan en gastos a la hora de darse caprichos. Sin embargo, la pareja más mediática del Reino Unido no sólo gastan en ellos mismos sino que también se acuerdan de quienes menos tienen.
Según publica el diario británico Daily Mirror, el matrimonio ha logrado recaudar, a través de su organización caritativa de ayuda a la infancia, más de un millón de euros en los últimos cinco años para los niños más necesitados. Durante ese tiempo, David y Victoria han ayudado a mejorar la calidad de vida de cientos de pequeños facilitándoles sillas de ruedas de última generación.
La organización caritativa de los Beckham, que está dirigida por Jackie, la madre de la ex Spice Girl, ha logrado recaudar 1.041.100 euros desde el año 2005, dinero que hasta el pasado mes de abril habían destinado a 12 causas diferentes. Las donaciones incluyen 2.835 euros para el Centro de movilidad del Sida, que proporciona sillas de ruedas a los que padecen esta enfermedad. El fondo, sin embargo, ha recibido menos financiación: ha obtenido 13.581 euros a diferencia de los 116,466 euros que recibió el año anterior. No obstante, sus gastos disminuyeron de 382.268 euros a 37.000 euros.
David Watling, el director gerente del fondo, ha declarado: “Que hayan recaudado tanto dinero y hayan ayudado a tanta gente es alucinante. Algunas de estas sillas de ruedas pueden costar más de 11.000 euros y te cambian la vida.”
En el año 2007, la pareja le compraron un dispositivo para que Callum Miller, de dos años, pudiese andar. Su madre, Jane, dijo entonces: “Cuando Callum dio sus primeros pasos apenas podía ver su cara sonriente a través de mis lágrimas.”
Este domingo, Victoria Beckham llegaba con sus tres hijos a Milán procedente de Londres. En la ciudad italiana se ha reencontrado con David, que este fin de semana ha disputado con su equipo, el AC Milan, un partido contra el Bologna en el estadio Dall’Ara de la ciudad italiana. Tras su paso por Milán, Victoria viajará a Nueva York para asistir a la semana de la moda, donde presentará su nueva colección de ropa mientras los tres niños se quedan con su padre.