John Terry parece que más que un futbolista genial, se está especializando en protagonizar noticias menos deportivas que las que debería protagonizar. Si hace tan sólo unos meses, se acusó a Terry de cobrar por visitas guiadas al estadio de Stamford Bridge, ahora la opinión pública le persigue por otra razón, algo más delicada.
Un juez británico ha permitido que se divulgue la noticia sobre el ‘affaire’, que el capitán de la selección inglesa ha tenido con Vanessa Peronccel, novia de Wayne Bridge, compañero de Terry en la selección británica.
Y es que el intento de Terry por acallar los rumores sobre esta infidelidad, no han dado el resultado que podía esperar. Sus abogados en un intento por tapar la noticia, interpusieron un recurso acogiéndose a la ley británica de los derechos humanos, argumentando que el asunto era estrictamente privado y que no había ninguna razón de interés público que justificase su publicación. Sin embargo, el juez Tugenthat, de la corte británica, ha permitido que toda la prensa británica publicara la noticia argumentando que era de interés público.
John Terry ha intentado por todos los medios evitar que esta noticia saliera a la luz, pero finalmente, tanto el Daily Telegraph como el diario The Sun, publicaron la noticia. El miedo del futbolista de perder las jugosas cuentas de publicidad que posee, son probablemente las razones fundamentales de este intento de secretismo. En total, más de 11 millones de euros factura el internacional inglés gracias a marcas como Umbro o Samsung.
Fabio Capello, seleccionador internacional inglés, tiene ahora una complicada tarea en el vestuario de su equipo, ¿cómo podrán compartir ahora una jugada en el campo? Según publica el diario británico The Sun, el enfado de Wayne Bridge es enorme, y no es para menos.
En nuestros campos, historias de vestuarios se vivieron hace muchos años, cuando Jose María García levantó la polémica al asegurar que Caminero, jugador entonces del Atlético de Madrid, había tenido un ‘affaire’ con la mujer de su compañero argentino, Simeone.
El mundo del fútbol tampoco se libra de estas cosas.