El ex diplomático Manuel Prado y Colón de Carvajal falleció el pasado viernes en la ciudad en la que tenía fijada su residencia, Sevilla, como consecuencia de un cáncer que padecía desde hace varios años. El que fuera amigo íntimo del Rey arrastraba esta enfermedad desde hacía tiempo, pero su familia aseguró que en los últimos días se encontraba en una situación de extrema gravedad. Hasta el momento de su fallecimiento su viuda, Celia García Corona estuvo a su lado y no se separó de él en ningún momento.
Este ex diplomático fue durante más de veinte años administrador privado del Rey. Sus Majestades los Reyes aunque mantenían una excelente relación con él no pudieron asistir al sepelio, pero sí que quisieron mostrar sus condolencias a través de una gran corona de flores firmada por los Don Juan Carlos y Doña Sofía, que llevaba el coche fúnebre.
Fueron muchos los amigos y rostros conocidos que quisieron dar el último adiós a Manuel Prado en el tanatorio de la SE-30 de Sevilla, donde se celebró la misa ‘corpore in sepulto’, y en el posterior traslado de sus restos al cementerio de San Fernando. Al funeral asistieron varios centenares de personas, entre ellos el ex ministro del PP Miguel Arias Cañete, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, los toreros Curro Romero y Martín Pareja Obregón y numerosos empresarios andaluces. Estuvieron también el humorista César Cadaval, el rejoneador Rafael Peralta junto a su mujer Mamer Revuelta y la modelo Ana Abascal.
El coche fúnebre que trasladó el féretro hasta el cementerio iba seguido por la viuda del ex diplomático, Celia García Corona, el hijo común de ambos, Álvaro, y una hija del primer matrimonio de la viuda, Marta Loscertales; aunque en el funeral estuvieron presentes los otros tres hijos de Prado y Colón de Carvajal: Manuel, Borja y Teresa, fruto de su unión con Paloma Eulate.