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Para Victoria Beckham no hay nada mejor que compartir su tiempo libre con su hijos, Brooklyn, Romeo y Cruz. Incluso aunque a veces le cueste mantener a raya a sus pequeños, la cantante disfruta llevándolos a sus lugares favoritos. En esta ocasión, la ex Spice Girl montó a los niños en su todoterreno y ella misma lo condujo hasta Yogurtland, un establecimiento de Los Ángeles, donde adquirió helados hechos a base de yogur para los tres.
No obstante, para Victoria no fue una tarde fácil y tuvo que luchar por controlar a los niños al tiempo que lucía su impecable estilismo: cárdigan y camiseta negra, pantalones pitillo grises y calzado a tono. Cada prenda o complemento que se pone, se convierte en tendencia, como los zapatos de altísimos tacones con los que dio una lección de cómo mantener el equilibrio en las situaciones más difíciles.
Y es que la esposa de David Beckham tuvo, además, que correr detrás de su hijo pequeño, Cruz, e incluso recogerlo del suelo, donde se tiró como consecuencia de una rabieta infantil. El benjamín de la casa ha demostrado, a sus cuatro años, su fuerte personalidad tanto en su caracter como en sus gustos. Ya se perfilá como el digno heredero del icono de la moda que ha llegado a ser su padre.