Genoveva Casanova se lo ha pasado como una niña en la inauguración oficial de la temporada de Halloween en PortAventura y eso que ha acudido sin sus hijos, Luis y Amina, que al ser día lectivo se quedaron en Madrid. Eso sí, le ha gustado tanto que piensa repetir la experiencia acompañada de los mellizos.
Ni Frankenstein ni Beatlechus ni la Niña del Exorcista han conseguido quitarle la sonrisa: “Me lo he pasado genial y me he reído mucho”. Los vampiros, muertes vivientes y monstruos caracterizados le han servido para recordar “las miles de veces que me disfrazaba de diablilla en la fiesta de Halloween”.
La bella mexicana se ha mantenido tan discreta como es norma en ella cuando ha sido preguntada por su amistad con el internacional cantante Luis Miguel y ha respondido: “Es un tema en el que no puedo entrar porque no me concierne” al ser preguntada por la relación de la Duquesa de Alba y Alfonso Díez. Lo que si comentó es que no se siente “sola” y que tiene el corazón “contento por muchas razones”. Una de ellas es la ilusión que tiene por un nuevo proyecto: “Voy a abrir una nueva línea de joyas de estilo un poco hippy, inspirada en las nuevas culturas que he conocido en mis viajes”.