Mientras su madre, Rosa Benito, se subía a La Noria -de Telecinco- para hablar de sus vivencias junto a Antonio Tejado, Rosario Mohedano acudía a la boda de unos amigos en la localidad malagueña de Fuengirola. Allí coincidió con otra profesional de la canción, Isabel Pantoja. La tonadillera llegó a pie, desde su casa, a la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario, donde fue recibida por un grupo de amigas. "Estás impresionante", le dijeron.
Isabel, muy bronceada, lució un vestido en capas de gasa color turquesa. Recogió su cabello con unas peinas del mismo tono y completó su atuendo con un bolso-bombonera decorado con cristales Swarovski. Al templo llegó en compañía de un amigo que apenas se separó de ella.
La artista, que fue una de las primeras en llegar, se sentó en una de las bancas cercanas al altar y siguió con emoción la llegada de los novios. Un poco más atrás se encontraba Rosario Mohedano, a quien sus amigas no descuidaron ni un momento. La sobrina de Rocío Jurado, que está recuperando su figura después del embarazo, escogió un vestido en color negro con grandes lunares blancos y escote alter, que combinó con un bolso de color oscuro.
Además de compartir amistades, parece que Rosario e Isabel han decidido guardar silencio en los que a sus respectivos ex novios se refiere. A pesar de la insistencia de los periodistas, los nombres de Julián Muñoz y Antonio Tejado no tuvieron cabida en este día tan especial. Aunque gracias a la intervención televisiva de Rosa Benito, pudimos saber que el sevillano llama varias veces al día a su hija para interesarse por Antonio, el hijo que tienen en común y que ayer se quedó al cuidado de Gloria Mohedano, tía de Rosario.