Belén Esteban, una novia emocionada y feliz en su boda con Francisco Álvarez

Los novios eligieron el Palacio de Negralejo, en Madrid, para oficiar y celebrar el enlace, al que asistieron 450 invitados

Por hola.com

Tras varios meses de preparativos y algún que otro percance, Belén Esteban se ha dado por fin el 'sí, quiero' con Francisco Álvarez. El lugar elegido por los novios para la ceremonia religiosa fue la ermita de San Antonio del Palacio del Negralejo, en Madrid, un lugar idílico para tan importante y significativo día. Como es tradición, la novia hizo esperar unos minutos al novio y llegó con algunos minutos de retraso. Pasadas las ocho de la tarde daba comienzo el tan esperado enlace.

La novia llegó del brazo de su hermano y padrino, Juan. Belén quiso honrar a su hermano con tan importante papel en un día en el que el recuerdo de su padre, Francisco, estaba más vivo que nunca. Cabe recordar que Francisco falleció en el mes de mayo de 2006, lo que supuso un duro golpe para toda la familia Esteban y, en especial para su hija Belén, con quien mantenía un vínculo muy especial. Como ya desveló en El programa de Ana Rosa, donde ella colabora, la novia lució un vestido palabra de honor en seda natural de color marfil entallado hasta la rodilla con una chaqueta bordada con cristales, de El Corte Inglés. Sobre la cabeza llevó una mantilla antigua, que adornó con una tiara de cristal de Swarovski. En sus manos, el ramo, hecho de orquídeas blancas y rosas.

El novio, que había salido de casa de sus padres, esperaba a la novia a la puerta del templo. Su madre, Maruja, ejerció de orgullosa madrina. Por su parte, Andrea, la hija de Belén, portó las arras. La pequeña llevaba un vestido en color marfil, con puntillas y volantes. La homilía fue muy emotiva y en ella, la pareja quiso recordar al padre de la novia. En el banco de los testigos se pudo ver a Ana Rosa Quintana y Rosa Mohedano, así como algunos amigos de la los contrayentes. Un coro rociero puso la nota musical a la ceremonia y entonó la Salve para los recién casados.

Una cena espectacular
A la boda asistieron 450 invitados, entre los que se encontraban muchos de los colaboradores, tertulianos y personal de El programa de Ana Rosa, que también son compañeros de la novia. Pudo verse a Chelo García Cortés, Belén Rodríguez, Luis Rollán, Lydia Lozano y Bibiana Fernández, entre otros. Ésta último tuvo unas bonitas palabras para la gran protagonista del día: "Ella se merece todo esto y mucho más; es una gran persona". Además destacó la presencia de Oscar Lozano, que mantuvo una relación con la novia y a quien ahora le une una buena amistad, y algunos miembros de la familia Janeiro-Bazán, en concreto, dos primas de Jesulín de Ubrique.

Tras la ceremonia, los novios agasajaron a sus invitados con un completo cóctel y una espectacular cena. Pero antes de comenzar el convite, los recién casados salieron a brindar con todos los medios que se habían acercado al lugar para cubrir el evento. "Han sido unos meses muy difíciles, hemos vivido muchas cosas buenas y malas, pero por suerte todo ha salido bien", dijo la feliz novia. La madre de Belén también se mostró muy cercana en este día especial y aseguró que tanto su nieta Andrea como su hija "están muy contentas".

Según los detalles que han trascendido, las mesas del salón donde tuvo lugar el banquete estaban decoradas con mantelerías de color ocre con unos bonitos centros de mesa con flores, entre las que destacaban lirios blancos. El menú nupcial contó con un primer plato de ensalada, un segundo a elegir entre pescado o carne, y un delicioso postre de tarta de chocolate.

Un ramo con gran valor sentimental
Una vez finalizada la cena, los novios inauguraron el baile, pero no al son del tradicional vals, sino con una canción más conocida y significativa para ellos: Love is in the air. Como en toda boda, Belén quiso regalar el ramo. En vez de lanzarlo, las flores ya tenían dueña: la madre de una de las fallecidas en el 11-M, a la que la novia conoció durante un programa de telvisión y con la que ha entablado una especial amistad. De hecho, la arras del enlace pertenecen a la la familia de la mujer.