por Leticia Brando (*)
Frecuentemente se trata de establecer diferencias entre hombres y mujeres. Desde estudios o desde el imaginario colectivo, surgen frases que señalan a las mujeres como más emocionales, más versátiles, más sentimentales, que pueden cocinar al mismo tiempo que miran la televisión o que hablan por teléfono. Los hombres suelen ser vistos como seres más racionales, partidarios de centrar su actividad en una sola tarea y suelen ser más parcos y menos demostrativos en cuanto a la expresión de sus sentimientos.
Padres responsables y el dilema de ser aceptados
Pero en las últimas décadas se han sucedido diversos cambios en relación a los dos géneros. No sólo en el hecho que la mujer es una figura visible en puestos de poder o en profesiones que en otros tiempos eran exclusivamente masculinas. También ha habido un cambio de sensibilidad en los dos sexos. Ellas vienen demostrado cierta autonomía en sus decisiones en el terreno emocional en cuanto a la pareja e hijos. A su vez, ellos demuestran que les preocupa tanto su trabajo como la crianza y crecimiento de sus hijos.
Precisamente, entre los cambios sociales que han acontecido en el último tiempo es el rol del hombre en su faceta de progenitor. Muchos padres no aceptan simplemente ver a sus hijos el fin de semana en caso de separación con la madre del niño. En caso de divorcio, muchos hombres en común acuerdo con sus ex parejas, asumen la custodia total de sus hijos. En el buzón de PARSHIP, aparecen muchos de estos hombres separados, solteros, divorciados o viudos, que crían y educan a sus hijos sin la presencia de una pareja femenina en su hogar. Muchos de ellos manifiestan ciertos dilemas, temen que su nueva pareja no acepte su realidad como padres y al mismo tiempo, que sus hijos no acepten a su pareja. Esa inquietud masculina también tiene su correspondencia en las madres solteras, viudas, separadas, divorciadas que circulan por PARSHIP.