El doctor Iglesias Puga y su esposa, Ronna Keith, están volviendo a vivir momentos de extraordinaria felicidad. El matrimonio, tal como ambos deseaban y el doctor había prometido en más de una ocasión, van a ser padres de su segundo hijo. «A mi mujer confesaba tiempo atrás con su característico optimismo y su vitalidad de siempre le encantaría ser de nuevo madre ».Pues bien, sus sueños serán realidad dentro de unos meses. La semana pasada, como informábamos a nuestros lectores, Ronna regresó a los Estados Unidos, donde el matrimonio tiene su residencia, con su hijo, Jaime, tras pasar unos días en España. Ronna, siempre muy discreta, declinó hacer declaraciones sobre los motivos de su estancia en nuestro país y su regreso a Estados Unidos, pero todo parece indicar que alguna relación pudo tener con su estado de buena esperanza.
El doctor Iglesias, que tiene actualmente noventa años, y Ronna, de cuarenta y dos, contrajeron matrimonio el 1 de marzo de 2001 en una ceremonia civil, celebrada dentro de la más absoluta intimidad, en Duval (Florida). Tres años más tarde, el 18 de mayo de 2004, nació James (Jaime) Nathaniel Iglesias, su primer hijo. «A mi edad, un hijo es maravilloso. Se disfruta mucho», nos decía el doctor el pasado mes de mayo, cuando Jaime cumplió su primer año. Entonces le preguntábamos al doctor si la llegada de este hijo fue más deseada por Ronna que por él, y esto es lo que nos contestó: «No. Puedo decir que cuando Ronna estaba embarazada yo "vivía " más a nuestro hijo que ella », a lo que añadió: «Si han dicho que Jaime fue una atención que yo quise tener con mi mujer, no lo considero como una ofensa. Pero la verdad y la auténtica realidad es que yo lo deseaba tanto como ella. A mi edad, tener un hijo es todo un regalo, todo un privilegio».