Es tanta la oferta que tenemos a día de hoy a la hora de hacer deporte que a veces cuesta decidir qué tipo de ejercicio es el que más nos conviene hacer. Es cierto que últimamente se ha hecho mucho hincapié en todos los beneficios que tienen el trabajo de fuerza y los entrenamientos de alta intensidad para nuestra salud. Es más, han irrumpido con tanta fuerza que el ejercicio aeróbico, mucho más clásico, en un discreto segundo plano. Pero eso no significa, ni mucho menos, que no pueda hacer mucho por nuestro bienestar y condición física.