1/2 © Adobe Stock

Existen los fitoestrógenos, que son sustancias de origen vegetal que se encuentran en pequeñas cantidades en alimentos que aportan flavonoides y que actúan como fitoestrógenos. Dos de las especies vegetales que más compuestos químicos de este tipo aportan son la soja y el trébol rojo. Y estudios recientes han demostrado que el lúpulo se suma a estas plantas.

2/2 © Adobe Stock

En Asia, donde el consumo de soja y ginseng es elevado, se ha comprobado en numerosas investigaciones cómo el comportamiento dietético de los alimentos que aportan fitoestrógenos se traduce en unos síntomas de menopausia muy amortiguados y menos trastornos relacionados con ella, como los sofocos.

Más sobre: