Si has pensado empezar a meditar sabrás que no te faltan buenas razones para haber tomado esa decisión. Está demostrado que meditar de manera constante reduce los niveles de ansiedad y de estrés, además de ayudarnos a ver con más claridad las cosas positivas de la vida. Solo con esto ya estarías cuidando de ti y de tu salud, pero la cosa no acaba ahí.