Podríamos definir la solidaridad como la ayuda desinteresada a otras personas, ya sea en aspectos emocionales o materiales. Podemos serlo con acciones claramente reconocibles como el voluntariado, pero también con pequeños gestos como sonreír o escuchar a alguien que lo necesita, donar pertenencias personales a causas concretas, colaborar de forma desinteresada y altruista en un proyecto...