A no ser que el médico nos diga lo contrario, estar embarazada no significa quedarnos en casa movernos. Durante los meses de gestación realizar ejercicio tiene mucha importancia por diversos motivos: nos ayuda a evitar un aumento de peso excesivo; mejora el funcionamiento del corazón y la circulación sanguínea; te ayuda a reducir el estrés y puede facilitar, en general, todo el proceso del embarazo.