Vamos a comenzar con unos ejercicios muy sencillos que no te llevaran más de cinco minutos al día, perfectos para cuando no tienes mucho tiempo.
Comenzamos con tres respiraciones profundas, hombros rectos, respiramos por la nariz y soltamos por la nariz, el aire tiene que llegar a nuestro estómago. Respiramos bien profundo y soltamos en tres veces vaciando completamente.
Estiramiento de cara ¡WOO! ¡WOO! ¡WOO!
Vamos a relajar y eliminar la tensión de nuestro rostro. Tenemos que vocalizar muy intensamente, sin fruncir el ceño. Cada vez que decimos '¡WOO!' Vocalizamos bien y abrimos los ojos intensamente con cuidado de no fruncir el ceño. Repetimos 5 veces.