Organiza tu maleta ¡con cabeza!
Consejos y recursos para que aprendas a preparar tu equipaje de la forma más eficaz de cara a tu próximo viaje
A todos nos encanta viajar, descubrir nuevos lugares y escapar de la rutina algunos días. Los meses de verano coinciden con la época del año en la que más desplazamientos se producen, sin embargo, independientemente de la estación, uno de los mayores inconvenientes y quebraderos de cabeza que suele producir a las personas llega con el temido momento de hacer la maleta.
Tiempo y clima
Antes de empezar a meter cosas sin ningún tipo de sentido, es importante pararse a pensar en las cosas que verdaderamente vamos a necesitar y, sobre todo, el destino escogido como parte de nuestra nueva aventura. La climatología y la época del año en la que viajemos marcará mucho la ropa que necesitaremos, por eso, echa un vistazo a alguna aplicación meteorológica que pueda ofrecerte un pequeño parte orientativo previo. De este modo, aunque siempre es conveniente llevar alguna prenda de algo más de abrigo o entretiempo si vamos a un clima cálido, o por el contrario alguna más veraniega, conseguirás ahorrar espacio y evitar llevarte prendas que probablemente no vayas a necesitar. Coge boli y papel, apunta todo lo que necesites y tacha de la lista conforme vayas metiendo cada prenda o ítem en la maleta para no olvidarte de nada importante.
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'Planning' diario
Visualiza las prendas que tienes en el armario y crea diferentes looks. Realiza un pequeño calendario semanal y apunta en las prendas que podrías llevar cada día. Por ejemplo, si vas a estar fuera de casa 7 días, puedes utilizar el mismo pantalón dos o tres veces, llevar un par de faldas o vestidos e ir combinando cada prenda con diferentes camisetas. Dos mudas por cada día – y alguna más de repuesto-, un par de pijamas y dos pares de zapatos y calcetines son más que suficientes. Para viajes más largos, piensa si tendrás la opción de poner una lavadora o si necesitarás más cantidad de ropa. En cualquier caso, este método es muy efectivo para ahorrar espacio.
Por otro lado, si vas a realizar un viaje a la playa, piensa que es probable que la mayor parte del tiempo estés en bikini o bañador. Mete cuatro o cinco en la maleta, algún vestido o pareo vaporoso que no ocupe demasiado espacio y que te permita bajar vestida y piensa que la ropa que necesitarás será sobre todo para dar paseos por la tarde-noche o salir a comer o cenar fuera.
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Neceser
Probablemente en casa tengas muchos más productos beauty de los que realmente necesites diariamente. Selecciona tus favoritos y únicamente aquellos imprescindibles. Una buena crema, base de maquillaje, corrector, polvos solares, colorete, máscara de pestañas, un eyeliner y un par de pintalabios, cepillos de dientes y pelo, dentífrico, así como aquellos productos que normalmente utilices en tu rutina desmaquillante, son suficientes. No olvides mirar tu calendario menstrual y llevar contigo los productos que utilizas habitualmente si fuera necesario.
Por otro lado, es importante que tengas en cuenta la normativa aérea si vas a viajar en avión y no lleves nada que tenga más de 100 ml. Normalmente con las bases de maquillaje, correctores, etcétera no suele haber problema, sin embargo, las cremas hidratantes, pastas de dientes, geles, champús y mascarillas y algunos perfumes suelen comercializarse en recipientes más grandes. No te olvides de comprar un kit de viaje especial para este tipo de casos en alguna droguería o perfumería para evitar sustos en el control del aeropuerto. En cualquier caso, para ahorrar espacio siempre viene bien tener un par de botecitos pequeños en los que llevar productos de higiene personal.
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Extras
Si te gustan los complementos seguramente te gustaría llenar la maleta de collares, pendientes, gorros, bolsos y todo tipo de accesorios. Selecciona solamente aquellos que más te gusten o que creas que realmente te podrías llegar a poner en tus días de descanso y mételos en una pequeña bolsita para que no se pierdan. Si llevas gafas o lentillas, no te olvides de meterlas en tu bolso antes de viajar, tampoco del líquido para hidratar las lentillas, en caso de que las lleves. Dinero en efectivo – con cambio de divisa si hiciera falta- un buen libro, o tu e-book, teléfono, cámara de fotos y/o vídeo, así como los respectivos cargadores que necesites y… ¡a disfrutar!