¿Sabes cómo cuidar tu corazón?
Desgraciadamente, las enfermedades cardiovasculares siguen siendo una de las principales causas de mortalidad en el mundo, muy especialmente en los países desarrollados. Organismos como la Fundación Española del Corazón, año tras año, campaña tras campaña (la última de ellas se celebró del 29 de septiembre al 5 de octubre) no se cansan de insistir en la importancia de la prevención para luchar contra estas afecciones.
Y es que parece ser que todavía nos cuesta creer que, para mantener el corazón sano, nuestra colaboración es crucial y, al mismo tiempo, muy fácil de llevar a cabo. Todo se basa en adoptar hábitos de vida saludable tan evidentes como desayunar bien todos los días, seguir una dieta variada y equilibrada o abandonar el sedentarismo que reina, a veces, en nuestra vida.
En esta línea, la marca Flora (cuya margarina original con omega 3 y 6 ha sido reconocida como producto adherido al ‘Compromiso de mejora’ de la Fundación Española del Corazón) ha elaborado un decálogo con el que quiere contribuir a perfilar las pautas básicas que todos deberíamos seguir para cuidar nuestro miocardio ahora que se acerca los meses más invernales y estamos inmersos de lleno en nuestra rutina diaria. Toma nota de estos consejos:
1. Desayunar: Ya sabemos de la importancia del desayuno en una dieta equilibrada. No debemos obviar esta comida, en la que es necesario coger las fuerzas necesarias para afrontar la jornada. Un vaso de leche semidesnatada, dos tostadas con pan integral o, biscotes integrales y una pieza de fruta son elementos ideales para completar un buen desayuno.
2. Comer variado y equilibrado: Indispensable para conseguir llevar una alimentación saludable es conocer la importancia del omega 3 y 6. Podemos encontrar dos tipos: los de origen vegetal, que controlan los niveles de colesterol y se encuentran en aceites de semillas como el de girasol, en los frutos secos o en las margarinas; y los omega 3 de origen animal, que se encuentran en el pescado azul (salmón), el boquerón o el atún, por ejemplo.
3. No abusar de la sal: ¿Quién no le echa algo de sal a sus comidas? El secreto se encuentra siempre en no pasarse de la raya. La reducción en la ingesta de sal ayuda a cuidar nuestro corazón, ya que de este modo se mantienen unos niveles normales de presión arterial. Puedes optar o bien por cocinar sin sal o bien con poca sal, aunque también se puede sustituir ésta última por plantas aromáticas o finas hierbas.
4. No nos olvidemos de los tentempiés: Para reponer fuerzas durante el día y no agotarnos, los tentempiés son algo muy útil. Estamos acostumbrados a tomar snaks salados o alimentos poco saludables. Para mejorar nuestra dieta, podemos sustituir este tipo de alimentos por otros más sanos como trozos de fruta, frutos secos o lonchas de jamón o pavo. Como acompañamiento, podemos tomar un té o una infusión.
5. Hacer ejercicio físico: El frío y la lluvia, hoy en día, no son ningún obstáculo a la hora de realizar ejercicio. Contamos con diversas alternativas para poder hacer deporte en esta época del año como acudir a un gimnasio, a una piscina climatizada, a un polideportivo,etc.
6. Realizar ejercicio en la oficina: Sí, el tiempo en el que estamos en la oficina también puede emplearse para realizar algún tipo de ejercicio cardiosaludable. Podemos hacerlo de diferentes modos: caminando mientras hablamos por teléfono, subiendo las escaleras o realizando ejercicios con las piernas, como flexionar nuestros abdominales mientras estamos sentados.
7. Realizar ejercicio en casa cuando haga mal tiempo: Probablemente, una de las cosas que más nos apetece con el mal tiempo es tumbarnos en el sofá, hacernos un ovillo con la manta y pasar la tarde viendo una película. Sin embargo, podemos aprovechar la publicidad para hacer algún tipo de estiramiento o ejercicio de piernas. Si lo prefieres, una buena forma de realizar ejercicio es renunciar al ascensor y subir por las escaleras, tu corazón te lo agradecerá.
8. Reforzar los hábitos saludables: La vuelta a la rutina, tras un largo período de descanso, suele llevar al estrés y a un aumento del estrés. Para poder superar estos síntomas, debemos cuidar determinados aspectos que influyen directamente en nuestro día a día: dormir bien, descansar, hidratarnos, pasear y realizar aquellas actividades que contribuyan a relajarnos.
9. ¡Tomar fibra!: La fibra es uno de los alimentos que nunca debemos olvidar que hay que tomar para llevar una dieta equilibrada. Para asegurar que esté presente en tu alimentación, hay que tomar alimentos que la incluyan: frutas, verduras, hortalizas; así como escoger alimentos integrales, como el pan, la pasta, el arroz o los cereales.
10. ¡Es hora de aplicar todos estos consejos y hacer un calendario!: El último consejo para mantener nuestro corazón en plena forma es coger un calendario e ir apuntando, día a día, todos los consejos que hemos ido aplicando. De este modo, tendremos plena seguridad de que estamos cuidando nuestro corazón de una manera óptima, lo que se traduce en vivir más y mejor.