La evolución de la medicina en las últimas décadas ha sido vertiginosa. Enfermedades que antes eran potencialmente mortales, hoy se pueden tratar con un sencillo tratamiento antibiótico. Y es que hemos tenido la suerte de vivir una época de grandes avances médicos, que ha generado "medicamentos milagrosos" para tratar enfermedades que hace unas cuantas décadas, o incluso hace unos años en el caso del VIH/sida, eran mortales. Pero, también en lo referente a la medicación hay que ser cautos, y por eso, con motivo del Día Mundial de la Salud 2011, que se celebra hoy como cada 7 de abril, la OMS lanza una campaña mundial destinada a proteger esos medicamentos para las futuras generaciones. Y es que cuando aparece la resistencia a los antimicrobianos, estos medicamentos dejan de ser eficaces.
El problema de la resistencia a los antimicrobianos no es nuevo, pero desde la OMS se insiste en que sí que se está volviendo cada vez más peligroso. Por eso, afirman que son necesarias actuaciones urgentes y unificadas para evitar que regresemos a la era preantibiótica.
¿Qué son los antimicrobianos?
Dentro de este grupo se encuentran aquellos medicamentos utilizados en el tratamiento de las infecciones, sean causadas por bacterias, hongos, parásitos o virus. Uno de los principales hitos en la historia de la salud humana ha sido su descubrimiento, que ha aliviado el sufrimiento y salvado miles de millones de vidas a lo largo de los últimos 70 años. Entre los antimicrobianos se encuentran los antibióticos, algunos agentes quimioterapéuticos, los antifúngicos, los antiparasitarios y los antivíricos. Su papel en la medicina es fundamental, pues la mayoría de nosotros vivimos más y con menos enfermedades, en parte gracias a que disponemos de medicamentos para tratar las enfermedades infecciosas. Mucha gente moría de enfermedades infecciosas hasta que se descubrieron en la década de los cuarenta del siglo pasado.
¿Cuándo dejan de ser efectivos?
Sin embargo, estamos a punto de perder este precioso arsenal terapéutico. El uso y el abuso de los antimicrobianos en la medicina humana y la ganadería durante los últimos 70 años han incrementado el número y los tipos de microorganismos resistentes a estos medicamentos, con las consiguientes muertes, sufrimientos y discapacidades, además del aumento del costo de la atención sanitaria.
La resistencia a los antimicrobianos (o farmacorresistencia) se produce cuando los microorganismos, sean bacterias, virus, hongos o parásitos, sufren cambios que hacen que los medicamentos utilizados para curar las infecciones dejen de ser eficaces. El fenómeno es muy preocupante porque las infecciones por microorganismos resistentes pueden causar la muerte del paciente, transmitirse a otras personas y generar grandes costos tanto para los pacientes como para la sociedad.
La importancia de usarlos correctamente
Seguro que más de una vez has tenido la tentación de dejar de tomar un medicamento cuando han comenzado los síntomas de mejora, pese a las recomendaciones del médico. Gran error. La resistencia a los antimicrobianos se ve facilitada por el uso inadecuado de los medicamentos, como, por ejemplo, cuando se toman dosis insuficientes o no se finalizan los tratamientos prescritos. Los medicamentos de mala calidad, las prescripciones erróneas y las deficiencias de la prevención y el control de las infecciones son otros factores que también facilitan la aparición y la propagación de la farmacorresistencia.