Tal vez no te has parado a pensarlo, pero una alimentación sana y correcta también puede convertirse en tu aliada en momentos de estrés. Frutas, verduras, cereales... su ingesta beneficiará a tu salud y también a tu mente, además de un elevado consumo de agua.
Todo lo contrario que las comidas más pesadas, las bebidas con cafeína, los azúcares o el alcohol, que favorecen el desarrollo de procesos de estrés. Una de las recomendaciones más útiles es evitar tomar café o té cuando el estrés acecha. En su lugar, ¿por qué no pruebas a tomar una relajante infusión? Tilas, valerianas... pueden ayudarte a desconectar del mundo en un momento en el que parezca que éste ha decidido ponerse en su contra.
Y es que no hay que olvidar que una alimentación sana sólo nos dará beneficios. Tu cuerpo te lo agradecerá.
¿Sueles tomar infusiones cuando estás nervioso?