Salud: ¿Listos para viajar a zonas exóticas?
Le damos las recomendaciones médicas básicas antes de poner rumbo a algunos de los rincones más bellos del planeta
No hay duda de que los hábitos de los turistas han cambiado en los últimos años y cada vez son más las personas que apuestan por viajes largos a zonas del mundo ubicadas en países tropicales, regiones del África Subsahariana o Extremo Oriente. Viajes de ensueño a lugares exóticos donde podemos disfrutar de una experiencia inolvidable. Pero no hay que olvidar que, para no tener ningún problema, hay que tener en cuenta una serie de recomendaciones saludables, pues en algunos de estos países existen enfermedades endémicas infecciosas y la salubridad y la higiene dejan, en ocasiones, mucho que desear. Esto hace que la prevención de enfermedades infecciosas transmisibles sea un paso obligado para los amantes de estas aventuras.
¿Tengo que vacunarme? Es fundamental que antes de iniciar el viaje se informe de las enfermedades endémicas de la zona. Para que el nivel de inmunidad en el momento del viaje sea eficaz, acuda con tiempo suficiente al Centro Oficial de Vacunaciones o a la Oficina del Viajero del Ministerio de Sanidad, donde, además, le informarán de las vacunas necesarias para cada destino. Las más frecuentes suelen ser: hepatitis A, hepatitis B, fiebre tifoidea, fiebre amarilla, poliomielitis, meningitis, rabia y encefalitis. Es conveniente también proveerse de un botiquín con analgésicos, antiinflamatorios, antihistamínicos y antidiarréicos. Los preparados antiparasitarios y los repelentes de insectos también son necesarios. Y no se olvide de una caja con material de curas, vendas, tiritas...
Ropa y calzado cómodos. Además, la ropa y el calzado deben ser adecuados. Las prendas, preferiblemente de fibras naturales y ligeras, algodón o lino, holgadas y de colores claros. En cuanto a los zapatos, opte por aquellos modelos que son cerrados, cómodos y, sobre todo, que transpiren bien.
El agua, siempre embotellada. El calor y la humedad son características constantes de estas áreas; por ello, el principal consejo es que mantenga un buen estado de hidratación, bebiendo abundante agua embotellada, acompañada de sales minerales para evitar el agotamiento y prevenir el golpe de calor. Báñese sólo en el mar o en piscinas de agua clorada y depurada. Las aguas de los estanques y lagos pueden transmitir parásitos o infecciones en los ojos y en la piel.
Ojo con el sol. La intensidad de las radiaciones solares es mucho mayor en los países tropicales y tienen mayor poder de insolación. Protéjase de los rayos del sol con gafas oscuras, sombrero y filtros solares de alta protección.
Extremar los cuidados si... Existen circunstancias personales que aumentan el riesgo en estos viajes. Padecer una enfermedad crónica, la edad, las minusvalías o el embarazo pueden incrementar las posibilidades de tener problemas. Los niños y los ancianos también son más vulnerables a los cambios climáticos y ambientales. Si padece alguna alteración (diabetes, hipertensión...) con tratamiento médico, no olvide llevar los fármacos necesarios e infórmese de las posibilidades de adquirirlos durante el viaje.
Recomendaciones útiles.
- Dormir con mosquitera.
- Usar repelente de insectos.
- Lavado frecuente de manos con agua y jabón.
- Beber sólo agua embotellada.
- No tomar alimentos crudos o de dudoso origen.
- No bañarse en aguas estancadas.
- Los cubitos de hielo, el agua del cepillado de los dientes y el del baño pueden transmitir infecciones y dar lugar a la diarrea del viajero.