Es una de las partes del cuerpo que genera un mayor número de molestias. Le proponemos un decálogo, sencillo y práctico, con consejos para prevenir o, en el caso de que aparezca, mitigar, dolores de espalda. Tome nota.
1. Es conveniente no llevar una vida sedentaria. Lo ideal es hacer ejercicio físico de forma habitual, eso sí, siempre con moderación y sin hacer sobreesfuerzos, que pueden ser contraproducentes y generarnos más problemas que beneficios.
2. El descanso es fundamental, por lo que convienene elegir un colchón confortable pero firme. Una de las mejores opciones es el látex, aunque es necesario darle la vuelta con frecuencia para evitar que se adapte en exceso a la postura habitual del usuario.
3. No siempre es fácil acordarse, pero procurar una actitud erguida es fundamental. ¿Por qué no intentarlo?
4. Intente agacharse y levantar las cosas desde el suelo siempre con las piernas flexionadas, sin forzar posturas.
5. Procure no levantar excesivo peso y, cuando deba hacerlo, repártalo lo más equitativamente posible entre los dos brazos.
6. La postura también es importante en el trabajo: el ordenador debe situarse enfrente y con la pantalla a la altura de los ojos, mientras que el teclado debe estar también a la altura adecuada para no forzar los brazos. La silla ha de permitir mantener la espalda recta.
7. Sobre todo si pasa mucho tiempo sentado en la oficina, al menos una vez cada hora, es conveniente levantarse, estirarse y caminar durante un par de minutos.
8. La relajación aprendida, los masajes y los estiramientos son muy eficaces, sobre todo antes de practicar algún deporte.
9. En ocasiones, hay que intentar cambiar de actitud corporal. La forma de sentarse o de permanecer de pie puede tener que ver con el origen del dolor.
10. El sobrepeso también influye de forma negativa (no hay que olvidar que la columna vertebral actúa como eje del organismo y soporta todo el peso del cuerpo).