Es más que probable que tengas por casa —la tuya, la de tus padres o incluso la de tus abuelos— algún mueble viejo que apenas utilices y estés pensando en tirar al contenedor. Nosotros te proponemos que le des otra oportunidad y lo recicles. Después de todo, esta es la apuesta medioambiental del futuro.
Nos parece una buena idea que su segunda vida tenga que ver con una de las tendencias en decoración más en boga, los muebles de aspecto 'vintage'. Si te decides, verás que no es tan complicado. Se requiere algo de maña y los materiales que te detallamos a continuación y que encontrarás, entre otros almacenes del bricolaje, en Akí:
Taco de lija abrasivo
Paletina DEXTER para pinturas acrílicas
Tapaporos
Set 4 formones
Pintura acrílica
Brocha
Cola blanca
Además de los muebles que quieras rescatar, claro. Nosotros hemos encontrado una cómoda y una silla en madera natural que nos encajan perfectamente para ser transformadas en piezas de gran personalidad. Pero hay que seguir las ‘instrucciones de uso’ paso a paso y con algo de cuidado.
Para empezar, ten en cuenta que los muebles han de tener unas condiciones mínimas de ‘salud’ para ser pintados. Así que examina su estado y repara los golpes, daños y roces. Para zonas regulares puedes usar suplementos cortando trozos de madera a medida. A continuación, pégalos con adhesivo y líjalos para que no se note la diferencia.
En caso de que los desperfectos se encuentren en zonas irregulares, emplea masilla reparadora (con resina y activador). Aplica la masilla en los huecos, dando forma o arreglando el tallado. Finalmente, déjala secar. Pero recuerda que si empleas masilla, el acabado debe ser con pintura para cubrir bien. Con barniz, se notará la zona reparada.
Se acerca el momento clave, el 'vintage'. Porque usar pintura actual para un mueble viejo da un aspecto retro. Sólo hay que envejecer la superficie con un taco de lija tipo esponja y aplicar la pintura del color elegido con una brocha plana y ancha. Cuando esté seca aplica una segunda mano con un rodillo de pelo corto o una brocha ancha. Para un acabado perfecto, lija la superficie. El truco es que al haber usado dos colores distintos y como la primera capa tiene textura, al lijar, se produce un aspecto envejecido.
Ya tienes tus muebles de estilo vintage para poder presumir de seguir tendencias de interiorismo, sin haberte gastado apenas lo que cuestan los materiales. Ahora sólo tienes que decidir dónde colocarlos para que se vean bien…
Más información:
www.aki.es
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