La última casa que sacamos en esta sección, hace un par de semanas, era un chalet unifamiliar ubicado en la localidad mallorquina de Puerto Andraxt. La que te mostramos en esta ocasión tiene un concepto diametralmente opuesto. Se trata de un amplio apartamento situado en el sur de Londres. Y sin embargo también aquí la luz y el espacio han sido claves a la hora de afrontar la decoración.
Con ese objetivo, el estudio de arquitectura FORM Design Architecture se planteó sencillamente deshacerse de lo superfluo para ganar luminosidad, espacio y funcionalidad. Los cambios en la distribución del espacio y la utilización de materiales de alta calidad convirtieron este loft en el lugar ideal para vivir y trabajar.
Claro que la idea no era hacer una reforma integral, sino una pequeña obra. Porque este apartamento situado en un almacén de estilo victoriano había perdido su carácter industrial por las divisiones del espacio propias de los años 90. Tras el trabajo del arquitecto del proyecto, Mike Neale, el resultado es un espectacular loft de estilo neoyorquino.
Cocina, despacho, zona para el descanso y espacio para el ejercicio son los ambientes integrados dentro del denominado Bermondsey Warehouse Loft, en el que las paredes sólo aparecen para marcar la separación con el dormitorio y los espacios destinados a baño, despensa y lavadora.
Esa uniformidad se consigue con el color de las paredes. Se han pintado en blanco los muros de ladrillo propios de la época industrial. El acento rústico, la calidez y la exclusividad vienen de la mano de un suelo de madera, cuyas tablas se rescataron de una antigua capilla galesa.
En forma de isla y de líneas rectas y puras, la cocina se realizó con piedra acrílica HI-MACS —en su acabado Alpine White—. Y es uno de los espacios que más llama la atención de este loft. Formada por un único elemento que integra fogones, pica y armarios, ha sido reducida a lo esencial para ganar funcionalidad e integrarse a la perfección en el estilo minimalista del resto del apartamento.
La zona de trabajo, situada en uno de los extremos del loft, está constituida por una mesa y dos estanterías elaboradas de nuevo con la piedra acrílica HI-MACS. La peculiaridad de esta área es que ambas estanterías y la mesa han sido concebidas como una única pieza cada una y delimitan sólo con su presencia el espacio dedicado a la oficina.
En cuanto a la iluminación, es esencial un espacio diáfano a la hora de crear ambientes. La eliminación de las divisiones permite que los rayos del sol que penetran por las ventanas de las paredes sur y oeste animen el espacio y completen la luz más tenue que entra por la cristalera de la pared orientada al norte. Además, una iluminación a base de LEDS de bajo consumo y programable permite con solo tocar un botón realizar diferentes configuraciones en función de la actividad a desempeñar.
Más información:
www.himacs.eu
www.form-architecture.co.uk
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