El queso es un alimento delicioso. Pocos son los que no aprecian su sabor, olor y textura. Porque hay casi tantas variedades como gustos, de modo que difícil es no encontrar uno que se ciña a tus necesidades.
Se puede tomar, como hacen los franceses, al final de las comidas; a modo de aperitivo, como acompañamiento de ensaladas, untado en pan, en canapé o en bocadillo. Las posibilidades son aún mayores que sus variedades.
Y por si esto fuera poco, hay que tener en cuenta sus propiedades nutricionales. Son muy parecidas a las de la leche (su alto contenido en calcio y fósforo lo hacen muy recomendable), pero tienen mayor contenido en proteínas concentradas y en grasas —algo malo tenía que tener—. También contiene vitaminas. En concreto, es un alimento rico en vitaminas A, D y B.
El queso es un alimento delicioso y muy beneficioso para la salud. Pero a veces da pereza cortarlo. Con esta tabla y estos cuhillos, te resultará más sencillo. (PULSA EN LA IMAGEN PARA ACCEDER A LA GALERÍA)
Vamos, que su ingesta supone montones de beneficios para la salud. Tantos como para comerlo con frecuencia. Sólo una pega. A veces da pereza cortarlo o no se sabe dónde presentarlo. Porque no se cuenta con los accesorios necesarios.
Por ejemplo, con los cuchillos adecuados, y a nosotros nos encantan los cuchillos diseñados para alimentos específicos. Como los de la firma Kikkerland que presentan +D2, llenos de colorido y diversión. Porque no todo lo de comer tiene que ser aburrido.
Realizados en plástico y acero inoxidable cada uno de estos cuchillos dispone de una tonalidad distinta para diferenciarlos rápidamente: el verde, para quesos blandos como el Brie o el Cheddar; el púrpura con el filo puntiagudo para los quesos curados; el amarillo en forma de espátula, para los que se desmenuzan como el Parmesano; y el tenedor azul para pinchar el queso durante el corte o para servirlo.
Se hace queso en Francia, España, Italia, Suiza... Así que hay tantas variedades como gustos: blandos, curados, para untar. Vas a necesitar un cuchillo para cada tipo.
Si tanto color te abruma, puedes optar por la idea de Iris. Se trata de una tabla de madera para cortar quesos que guarda en su interior una bandeja extraíble donde se almacenan cinco utensilios diferentes para los distintos tipos de quesos, duros y blandos: punzones, cuchillos y palas.
La ventaja de este producto es que puedes tenerlo en la cocina para cortar los quesos. Pero también puedes sacarlo a la mesa para servir y cortar los alimentos. Práctico y bonito.
También los alemanes de WMF cuentan con una serie de utensilios de gran calidad especialmente pensados y fabricados para cortar diferentes variedades de queso. Un cortador con cuchilla ajustable de 22 centímetros; otro un poco mayor; y otro que directamente corta en lonchas.
También disponen de un cuchillo de 28 centímetros; un hachita y un rallador de 25 centímetros. Porque no siempre hay que comer el queso en lonchas. Y ten en cuenta que una pieza de parmesano rallado en casa da mil veces más sabor a tu pasta que el que encuentras en el supermercado en bolsitas, ya rallado.
Más información:
www.masd2.com
www.iris.es
www.wmf.es