En poco más de 10 años, la cadena de hoteles Room Mate se ha convertido en una gran empresa hotelera con establecimientos por todo el mundo. Quizás porque no son hoteles al uso, no es —ni mucho menos— una cadena ‘como las demás’.
Los espacios Room Mate son muy personales, cada uno muy diferente de los otros, tienen personalidad propia, decoración única y nombre propio. Pero no un nombre cualquiera, sino el de ‘un amigo’ que te espera para enseñarte la ciudad. Esa fue la idea con la que Kike Sarasola creó la marca de hoteles.
Los hoteles de la cadena Room Mate tienen nombre propio, como de amigos que le esperan a uno para enseñarle la ciudad. (PULSA EN LA IMAGEN PARA ACCEDER A LA GALERÍA)
Una marca cuyo más reciente ‘amigo’ lleva el nombre de Waldorf y vive en Miami. Está situado en el corazón del distrito de South Beach, en la conocida Ocean Drive, frente a la playa y es el segundo hotel de la cadena en EEUU.
Desde el exterior se evidencia que no es un lugar ‘corriente’. Está rodeado del glamour y el buen gusto del art decó americano, ya que se emplaza en un edificio protegido, que data de la década de los años 40 del siglo XX.
Para decorar su interior con todo el cuidado que requería la ocasión, Kike Sarasola recurrió al prestigioso interiorista Nacho García de Vinuesa, para quien este proyecto “tiene algo de mágico porque soy amigo de Kike desde hace 25 años pero nunca había realizado ningún trabajo para él”. Así que se puso manos a la obra.
Para Nacho García de Vinuesa este proyecto “tiene algo de mágico porque soy amigo de Kike desde hace 25 años pero nunca había realizado ningún trabajo para él”.
"El primer problema que se nos planteó era que el edificio estaba catalogado como histórico. Miami es muy exigente en cuanto a la recuperación del aspecto original, especialmente en la zona del vestíbulo y fachada. Esto hace que los hoteles históricos parezcan un poco aburridos”. Nada que ver con lo que querían para el establecimiento y que solventaron sin problema.
Porque lo que han conseguido es “un estilo art-decó fresco y elegante en todo el hotel. Todo el mobiliario ha sido diseñado ex profeso para conseguir este ambiente. Nos hemos inspirado en los grandes diseñadores de muebles de los años 40 y 50. La cuidada iluminación, especialmente diseñada, contribuye a conseguir un ambiente glamuroso en todas las estancias”, comenta García de Vinuesa.
Otro de los retos con el que se enfrentaron tiene que ver con el público: “Nos preocupaba el hecho de que los clientes de South Beach tienden a tratar los hoteles muy mal (demasiados mojitos a veces) por lo que decidimos forrar de vinilo las paredes, usar colores que ayudaran con el tema de la limpieza, poner alfombras de alta calidad en pasillos de tránsito y tratar los muebles con un barniz muy resistente.
El hotel ha sido diseñado y construido usando sistemas de instalaciones ecológicos, pensados para reducir los consumos energéticos y las emisiones de CO2.
A pesar de todas estas dificultades, se ha conseguido dotar de gran personalidad y un encanto muy especial a este hotel que, además, es el primero de Miami Beach que cuenta con la certificación LEED.
Es decir, que ha sido diseñado y construido usando sistemas de instalaciones ecológicos, pensados para reducir los consumos energéticos y las emisiones de CO2 a la atmósfera. Pero además garantiza que los procedimientos de operativa del hotel están dirigidos a mejorar el rendimiento del mismo en todos los aspectos.
Más información:
www.room-matehotels.com
www.gdev.es