En alguna otra ocasión hemos hablado en estas páginas de la conveniencia de regalar decoración en ocasiones especiales. Por ejemplo, el Día de los Enamorados. O el Día de la Madre, ¿por qué no?
Lo de los perfumes o la ropa es muy arriesgado (el gusto del olfato no es infalible; y con las tallas, se juega uno ‘el tipo’). Además de que está muy manido. Sin embargo, un detalle para la casa o similar puede ser una gran idea. Y mucho más personal de lo que crees.
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Es fácil encontrar un regalo para cada sensibilidad, para cada personalidad… y para todos los presupuestos. Por ejemplo, las propuestas de Lladró están repletas de sentimiento de gratitud a la madre. Ellas son las protagonistas indiscutibles de la edición limitada que la firma ha lanzado con motivo de tan especial día.
Se trata de dos piezas. Naturaleza maternal, producida en una serie única de 1.500 piezas, combina dos tonalidades del blanco y detalles platino en la copa del árbol. Madre dichosa (2.000 piezas) se inspira en las líneas clásicas de la firma: el busto de una madre con su bebé en el que se emplea tonos tierra y azulados y tonalidades mate y brillantes.
Para las que sean más prácticas, la misma firma ofrece Las Lámparas Mujer Contemplativa, que rinden un homenaje a la mujer y, para ello, la elevan sobre un pedestal. Sus tonalidades encajan en cualquier tipo de ambiente y decoración, y como lámparas de sobremesa, no pueden resultar más útiles.
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Muy útil es también un jarrón. Imprescindible en todo hogar que se precie. Y más aún aquél en el que habita una madre. Porque vale, regalar flores el Día de la Madre es un precioso detalle. Pero lo será más si se acompaña del recipiente perfecto para conservarlas. Por ejemplo, el que presenta Thun.
La firma de porcelana italiana ha lanzado recientemente la colección Elegance, que destaca por los tonos marfil complementado por el gris jaspeado. Al que se añaden aplicaciones incrustadas en tonos translúcidos que dan personalidad a jarrones (nos encanta el mediano, de 20 centímetros), lámparas, vacía bolsillos…
Y si se quiere apostar por lo seguro: los marcos de la firma, en el que podrás colocar una imagen de familia. O de la madre con sus hijos. Eso es lo que más aprecia una madre: un detalle personal, pensado por los miembros de la familia.
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¿Otro ejemplo? Conseguir que se trate de un día especial desde antes incluso de levantarse. Para ello te proponemos que le preparéis el desayuno entre todos. No sólo tiene que ser especial el contenido. También el continente.
Y un modo sencillo de acertar, es utilizar los divertidos y coloristas complementos de la línea Breakfast de la firma americana Zak! Designs. Toma nota de lo que has de hacer: servir un humeante café con leche en tazas de colores. Eso sí, junto a un zumo de naranja conseguido con el exprimidor de cítricos.
Las tostadas, presentadas en una bonita bandeja, junto con la mermelada y su correspondiente cuchara. Colocar en el recipiente para huevos, un huevo recién hecho y acompañarlo de su respectiva cucharilla para huevos. Por último, presenta la mantequilla en su mantequera correspondiente y su espátula de untar.
Más información:
www.lladro.com)
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