Sustituye el sifón de tus desagües para evitar malos olores
Es una operación más sencilla de lo que pudieras imaginar; ´tan sólo has de seguir unos sencillos pasos, ¡toma nota!
El sifón es un tubo en forma de ‘S’ acostada. La curva inferior permanece permanentemente inundada cumpliendo la función de tapón contra malos olores, así como de depósito de objetos o residuos pesados que podrían llegar a taponar la canalización. Sustituir, e incluso instalar un desagüe de sifón tipo ‘botella’ es sencillo, y nos protegerá de malos olores y obstrucciones en la canalización interior.
Para llevar a cabo esta tarea, lo primero que tendremos que hacer es localizar el tubo de desagüe del lavabo o el fregadero; los más antiguos suelen ser de plomo.
Retirar la vieja instalación
A continuación, utilizaremos una sierra para metales y seccionaremos el tubo a unos 10 o 15 centímetros del punto de entrada de la pared o del suelo. Si la instalación vieja lleva una válvula, la quitaremos, puesto que los sifones modernos llevan esta pieza incorporada.
Con una mordaza o llave aflojaremos la tuerca que la sujeta al lavabo y la quitaremos. Colocaremos a continuación las piezas nuevas. Para la unión entre el sifón y la canalización del desagüe utilizaremos un tubo de empalme que ajustaremos a la cañería.
Colocación del nuevo sifón
En las piezas de conexión aplicaremos silicona para asegurar la estanqueidad. Para las uniones entre piezas de PVC también existen colas especiales para este efecto. La unión entre tubo de metal y sifón se hace con una junta de las dimensiones adecuadas; aseguraremos la estanqueidad con silicona, cinta de teflón y, mejor aún, la tradicional estopa.
Colocaremos a continuación la rejilla de filtración y la junta de goma, habitualmente de color blanco, que se coloca al fondo de la pila en la parte visible, así como la junta y la sujeción inferiores. Estas piezas van unidas por un tornillo alargado que se introduce de arriba abajo.
Últimos pasos a seguir
Por la parte inferior colocaremos la junta de goma de color negro y la sujeción, que a su vez irán unidas a un tubo móvil insertado en la ‘botella’. El conducto del sifón se fija a la pieza que acabamos de colocar por medio de una tuerca de plástico.
Finalmente, ajustaremos la posición del tubo móvil con la altura de la tubería de desagüe y apretaremos bien con la mano.