Volar es uno de los anhelos más deseados de la humanidad desde tiempos inmemoriales. Una de las primeras experiencias en estos intentos corrieron a cargo de los chinos, precisamente con la utilización de enormes cometas. Pero, por el momento, no nos interesan emociones tan fuertes, así que nos ceñiremos a diseñar un bonito juguete volador: una cometa.
Sólo necesitaremos un serrucho, pistola de encolar, anillas, ganchos, gomas, cinta de nailon adhesiva, cuerda de nailon, aro de goma, hilo de nailon y aguja, cinco metros de cinta de nailon de tres centímetros, tela de nailon para cometa de 100 x 80 y cartón de 73 x 73.
Construir el armazón
Para el diseño de la plantilla recurriremos a la cometa más sencilla, esa con forma romboide y con una larga cola de estabilización. Cortaremos la forma de la cometa sobre el cartón y la trasladaremos al retal. Para reforzar y decorar los bordes de la cometa pegaremos una cinta de nailon montada a medias entre la cara y el dorso de la cometa. Cortaremos las cintas a ras, encolando bien los remates para que no se desprendan.
En las cuatro puntas coseremos otras tantas fundas de nailon. Estas piezas no van encoladas, ya que dejaremos los lados interiores y un costado abiertos para poder deslizar bajo el petacho la varilla del armazón.
Cuerdas y más cuerdas
El siguiente paso será colocar las aspas que constituyen el armazón de la cometa. Uniremos las varillas por medio de una goma elástica, que evitaremos ceñir demasiado; en caso de choque, la elasticidad puede evitar la rotura de la madera.
Puesto que las aspas volarán por la parte superior de la cometa, tendremos que perforar dos agujeros en la tela. También comprobaremos que la cuerda de sujeción sufre tensiones muy fuertes.
Perforaremos las tres capas de nailon con un clavo candente para evitar cualquier posibilidad de deshilachamiento e introduciremos un trozo de cuerda a través de los agujeros.
Últimos pasos
El ovillo de cuerda que sujetaremos en el suelo lo confeccionaremos con un tubillón cortado a medida, al que practicaremos dos hendiduras en los extremos con las que podremos aprisionar la cuerda, evitando que se enmarañe.
Para sujetar la cuerda a la cometa ataremos una anilla a la cuerda de la cometa y un cierre de gancho a la cuerda.
Finalmente, uniremos dos o tres cintas de nailon de unos tres metros de largo en uno de los extremos de la cometa. Las res cintas penderán de una goma de pelo que, a su vez, introduciremos en la parte baja de la cometa deslizándola en la varilla central.