Seguro que te parecerá un detalle sin importancia, incluso no habrás reparado nunca en ello, pero los tiradores de armarios y cajones son un elemento de enorme importancia en la decoración de una estancia.
Probablemente, que pasen desapercibidos se debe a que son bastante neutros o incluso de lo más discreto pero, ¿qué pasaría si te decidieras a cambiarlos?
Hasta hace algunos años los tiradores que se solían modificar de manera habitual eran los de las cocinas, ya que únicamente con este pequeño detalle podías cambiar su aspecto sin tener que realizar ningún tipo de reforma.
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Dale un nuevo aire a la habitación sin realizar una gran inversión Cuando se cambia el tirador de una cocina y se modifica el color, no es necesario cambiar los muebles. A partir de ese pequeño detalle podrás elegir otras cortinas e incluso el resto de accesorios para que combinen a la perfección.
Pues bien, ya no sólo existe la posibilidad de cambiar los tiradores de tu cocina para conseguir una renovación de cualquier estancia. La mayor ventaja de este cambio, además que hace referencia al plano decorativo, es la de que podrás cambiar la imagen de la habitación sin tener que hacer una inversión excesivamente grande, ya que en tiempos de crisis, seguro que no es lo que más te convence.
Diferentes estilos y formas de lo más original Dependiendo de tus gustos y del estilo de tu casa, podrás decantarte por tiradores más vanguardistas o clásicos, de gran tamaño o algo más discretos.
Los diferentes materiales de los que están elaborados estos elementos permiten que puedan combinar de manera perfecta con cualquier tipo de estilo: rural, moderno, minimalista, romántico, etc.
Las últimas tendencias en tiradores suelen ser en metal y con formas geométricas que podrán combinarse con maderas o cualquier otro tipo de material, lo que hará que el estilo de tu habitación adquiera un tono de lo más moderno y vanguardista.
Con el cambio de este simple accesorio podrás renovar un mueble que te parecía aburrido y que incluso te habías planteado desechar.
Otra de las ventajas es que no te supondrá demasiado esfuerzo, ya que los tiradores de los muebles generalmente tienen solamente dos tornillos, por lo que te resultará muy sencillo cambiarlos por otros si además eliges un modelo que encaje en los agujeros de los tiradores que ya estaban hechos.