Si te paras a pensar, el recibidor de tu casa es la parte que ofrece la tarjeta de presentación del resto de la misma. Por este motivo, has de evitar en lo posible que parezca desordenado y darle la elegancia que tu casa se merece. Ordenar las cosas en el aparador es una tarea muy sencilla, a excepción de que tu casa sea muy pequeña y no tengas hueco para dejar las cosas. Cuando eso sucede, si además tienes la desventaja de que no cuentas con demasiados armarios, la cosa se te complica.
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No dejes ni un solo detalle al azar
Según llegas a casa, lo que más te apetece es tirar las cosas y tumbarte en el sofá, si no las tienes ordenadas lo que puede pasar es que tu hogar tenga una apariencia desordenada, especialmente si dejas los abrigos, el bolso o el paraguas por encima. Aunque esté limpia y ordenada, sólo con esos tres elementos acabarás con la organización visual de la estancia. Por esta razón, te recomendamos que le des un toque diferente a la decoración, pero siempre con funcionalidad. En esa línea, un buen perchero puede ser tu solución.
Los hay de múltiples tipos, desde los que se cuelgan directamente de la pared para aprovechar el espacio, a los que son de pie y ofrecen formas y diseños espectaculares, que además de servirte para no dejar las cosas tiradas por el medio, decorarán el recibidor de una manera excelente.
Diseños, materiales y detalles originales a tu plena disposición
Existen numerosos tipos, pero también una gran variedad de materiales, pueden ir desde los más vanguardistas a los más rurales, cromados, de piedra, plástico, hierro… Las posibilidades son infinitas. Como te hemos comentado antes, el recibidor es lo que causa la primera y buena o mala impresión a tus invitados cuando llegan a casa, por eso resulta imprescindible que cuidemos hasta el último detalle.
Un perchero, un paragüero o cualquier elemento de este estilo puede servir perfectamente para darle ese toque diferente y especial que aporte el toque personal que seguro quieres darle a tu casa. La originalidad es siempre una apuesta segura, pero esto no significa que si tu estilo es clásico no tengas la oportunidad de desarrollar al máximo tu creatividad.
En el estilo de cada habitación es necesario cuidar de los detalles, pero sin llegar a recargar. El recibidor no deja de ser una estancia pequeña, pero no por ello menos agradable.