El arte de confeccionar y aplicar un tampón (pequeña caja con una almohadilla empapada en tinta) decorativo en paredes o muebles puede convertirse en un medio creativo diferente. El tampón puede hacerse copiando un dibujo a escala sobre una placa de goma especial o haciendo el tampón sobre un trozo de linóleo.
Los utensilios para cortar el linóleo son fáciles de utilizar y las técnicas existentes permiten una gran diversidad de resultados. Para estampar tus paredes, necesitarás linóleo, utensilios de corte, vidrio biselado, un rodillo de tinta, papel de calcar, tinta de estampación, papel carbón, lápiz, bolígrafo y rotulador, además de un trozo de contrachapado de 2 cm, papel, aguarrás y trapos sin pelusa.
Una divertida técnica
Aunque esta técnica parece similar al estarcido, presenta importantes diferencias que te explicaremos a continuación :
1- Imprimir el motivo: Utiliza una fotocopiadora para hallar la dimensión adecuada y corta el linóleo a la medida deseada. Copia el motivo trazando el contorno con un bolígrafo sobre una hoja de papel carbón colocada sobre la placa.
2- Cortar el linóleo: Repasa el contorno con un rotulador de punta fina indeleble y rellena las áreas que deban recortarse. Prueba antes los utensilios de corte sobre un trozo de linóleo, un material que se corta más fácilmente si previamente ha sido calentado.
3- Extender la tinta: Prepara la tinta de estampación y pon una pequeña cantidad sobre el centro del vidrio, para luego distribuirla con el rodillo. Recubre la superficie del rodillo uniformemente de tinta, añade más cantidad y vuelve a pasar el rodillo.
4- Cubrir el linóleo: Coloca el linóleo sobre el contrachapado y pasa el rodillo entintado firmemente sobre el motivo. La parte en relieve del motivo que absorbe la tinta aparecerá al estamparse. Después, limpia el tampón con aguarrás y recorta el resto.
5- Probar el estampado: Cuando el motivo quede bien definido en el tampón, cúbrelo de tinta con el rodillo y comprueba el estampado sobre un trozo de papel. Lograrás un estampado preciso presionando el dorso firmemente y retirándolo con seguridad.
6- Estampar la pared: Finalmente, entinta el motivo y presiona el tampón sobre la superficie pintada con un movimiento de balanceo firme. Sostén el linóleo con fuerza para que no se deslice sobre la superficie y, si quieres que los utensilios no se deterioren, límpialos con tinta de aguarrás para poder repetir este sencillo proceso en el resto de habitaciones de tu casa.