Si para algo sirven los convencionalismos, es para saltárselos; por eso, hoy vamos a darte algunas ideas por si sientes la necesidad de darle un giro radical a la decoración de tu casa.
En esta ocasión, siéntate frente a la cama y observa qué es lo que podrías modificar sin demasiadas complicaciones, pero sobre todo lo que dará ese toque especial y personal que tanto deseas para tu estancia más íntima. ¿No se te ocurre? ¿Qué te parecería desechar el cabecero de tu cama? Las nuevas tendencias han ido dejando a un lado los cabeceros barrocos, pasando, poco a poco, a un estilo minimalista que combina prácticamente con cualquier estilo.
Foto: Im-personal
Arriésgate con la habitación más personal
Ha llegado la hora de innovar, para ello puedes encontrar una alternativa a los cabeceros más tradicionales, no por ello tiene que resultar especialmente chillón o llamativo, sino que te puedes decantar por cualquier estilo y todos ellos quedarán perfectos sin que te rompas demasiado la cabeza.
Si además tu habitación no es especialmente grande y necesitas algo más de espacio, la forma ideal es pintar el cabecero o sencillamente prescindir de él. Muchas veces resulta complicado pasar por los pies de la cama, quedan muy pocos centímetros y esto es muy incómodo a la hora de moverte por la habitación. Si quitas el cabecero y lo pintas o colocas enormes cojines sobre la cama, esos centímetros, pueden servirte para maniobrar de forma más cómoda.
Existen varias opciones
Si crees que prescindir del cabecero puede hacer que la habitación genere una sensación de desnudez, olvídalo. Existen diversas plantillas con dibujos que puedes pegar en la pared de forma que sigas teniendo un cabecero, pero sin ocupar ni un solo milímetro. Otra manera son esas mismas plantillas, pero para que seas tú la persona que se encargue de pintarlos sobre la pared.
Si las manualidades no son lo tuyo también puedes dejar la cama junto a la pared y buscar otras alternativas para decorarlo, como la que te habíamos comentando anteriormente, los cojines. Si los elijes de diversos tonos que combinen con el resto de la habitación, pero que puedan crear un contraste original, no echarás en falta ningún accesorio más.
Por otra parte, si tu estilo es de lo más hippie, podrás colgar telas con motivos exóticos que también vestirán la pared y te alejarán de esa sensación de desnudez que puede provocarte ver la cama sin el cabecero. También tienes la opción de decantarte por hermosas y originales fotografías, que personalizarán la estancia.
No le des más vueltas, arriésgate y verás cómo el resultado te acaba enamorando.