Esto no es un bizcocho de chocolate

En realidad, este postre incluye un saludable ingrediente que resulta ideal como sustituto del cacao. Os contamos cómo prepararlo en casa, así como todos los detalles del interesante libro donde puedes encontrar ésta y otras muchas recetas dulces especialmente pensadas para quienes padecen intolerancias alimenticias

por Iraide Almudí

“Lo primero que te da es un shock: no sabes por dónde empezar y cómo organizarte”. Así describe Gabriela Marchesotti el momento en el que le comunicaron que su hija padecía celiaquía. Aquello fue hace 14 años y, desde entonces, esta argentina afincada en Madrid, se dedicó a investigar y estudiar todo lo relacionado con esta intolerancia, tanto en el terreno teórico como en el práctico. “Durante meses observé cómo se comportan las alternativas a los productos con gluten que había en el mercado. Después de grandes fracasos en la cocina pasé a pequeños logros; pasé del caos al control”, cuenta.

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Fue ese ‘control’ adquirido y su pasión por el mundo dulce lo que, en 2011, le animó a fundar la primera pastelería ‘gluten free’ de Madrid (Singlutentaciones) y lo que, también, le ha llevado ahora a publicar ‘Pastelería Sin Sin’.

Una novedad editorial recién aterrizada en las librerías (Libros Cúpula. Precio: 18,95 euros) cuyas páginas reúnen recetas y trucos para preparar postres -también incluye recetas saladas- especialmente pensados para quienes padecen algún tipo de intolerancia o alergia alimenticia, no sólo al gluten, sino también a la lactosa, el huevo, etc.

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Recetas como este apetecible bizcocho que os mostramos a continuación, a modo de pequeño 'aperitivo', y que seguro sorprende a más de uno. Y es que, aunque a primera vista puede parecer que el chocolate se su ingrediente principal, en realidad está hecho con harina de algarrobas (semillas que encontramos dentro de las vainas del algarrobo, ricas en fibra, bajas en grasas y libres de gluten). Su sabor dulce y sus propiedades saludables hacen de ellas una excelente alternativa para las recetas que normalmente incluyen chocolate o cacao en polvo. Si nunca has cocinado harina de algarroba, este bizcocho -también apto para intolerantes a la leche- puede ser, por qué no, un buen comienzo. He aquí el paso a paso:

Ingredientes: (para 8)
-100 g de harina de arroz integral
-60 g de fécula de patata
-35 g de harina de algarroba (alternativa al cacao)
-40 g de harina de almendra
-100 ml de bebida de arroz (o de coco o de almendra)
-15 g de levadura química
-80 g de azúcar de coco
-100 ml de aceite de girasol
-3 huevos

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Elaboración:
-Precalentar el horno a 180ºC, con calor arriba y abajo. Engrasar el molde con aceite o spray desmoldante. (Puede ser un molde grande u ocho moldecitos pequeños de plumcake).
-Mezclar bien la harina de arroz integral, fécula de patata, la harina de almendra, la harina de algarroba, la levadura química y reservar.
-En un bol, batir los huevos con el azúcar de coco, añadir aceite y la bebida de arroz. Agregar la mezcla de las harinas y remover bien hasta obtener una masa homogénea y bastante líquida.
-Echar en el molde y hornear 25 minutos o hasta que al pinchar con un palillo, este salga limpio.

CONSEJOS PRÁCTICOS

Además de las recetas, Gabriela ofrece en este libro consejos prácticos a tener en cuenta cuando algún miembro de la familia es celíaco, tal y como ocurre en su casa. Tips como estos, que también nos adelanta:

  • ‘Por un poquito no pasa nada’. ¡Pensar esto es un grave error! Dependiendo de la alergia o intolerancia, puede ser la causa por la que alguien tenga que ser atendido en un hospital. Los síntomas pueden variar de una persona a otra, pero hay quien, incluso, pone en peligro su vida con una simple traza del ingrediente 'fatídico'.
  • Utiliza una bolsa de color identificada para ir a hacer la compra, y utilízala solo para poner en ella productos sin gluten, sin frutos secos, sin leche, sin huevo, en función de la alergia o intolerancia alimentaria de la que se trate.
  • Compra alimentos empaquetados, con etiquetas con el logo ‘Sin gluten’ y evita alimentos a granel.
  • Consulta las etiquetas de los productos y las listas de ingredientes aptos en tu país. Los productos de algunas marcas pueden variar, dependiendo de dónde se fabriquen.
  • Mantén en la despensa, la nevera o el congelador los alimentos sin gluten bien separados del resto. Utiliza los estantes superiores para ingredientes o productos sin gluten.
  • Guarda los ingredientes y alimentos en papeles, bolsas o recubiertos con film, bien identificados con etiquetas o rotulados sin gluten y con la fecha de caducidad.
  • La exhaustiva limpieza de manos, encimeras, electrodomésticos y utensilios antes de cocinar es fundamental. Es decir, que antes de utilizar el horno, la batidora y los moldes de cocina, hay que limpiarlos muy bien para evitar la contaminación cruzada.

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  • Las bolsas para tostadoras y el papel de horno son buenos recursos para evitar contaminación al utilizar estos electrodomésticos.
  • Para asegurarte de que no haya residuos, un truco es preparar primero las recetas sin gluten y dejar para después el resto.
  • Utiliza delantales de cocina, paños, manteles individuales y servilletas limpias en la mesa.
  • Guarda en bolsas tipo zip bizcochos, galletas, bocadillos y frutas para llevarlos y comer fuera de casa.
  • En la oficina, pon un bote específico para las galletas sin gluten, diferente a los otros que guarden elementos utilizados por varias personas, por ejemplo, el azúcar o las bolsitas de té, así evitarás confusiones.
     

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